La devaluación del peso llevada a cabo por el gobierno el 14 de agosto derivó en un salto inflacionario inmediato que dejó muy atrás al salario.

Así surge del dato que publicó el Indec en la tarde de este jueves. Según la información oficial, el índice general de salarios creció un 7,6% en agosto, versus una inflación del 12,4%. Se trata de la caída mensual más profunda en lo que va del año.

El índice general de salarios es el resultado de la combinación de lo sucedido en sus tres componentes: los salarios privados registrados, los privados no registrados (popularmente llamados “en negro”) y los del sector público. El dato es importante porque marca la posibilidad de que existan asalariados en situación de pobreza y, además, cómo se distribuye la riqueza generada en el país.

Cada uno de estos componentes muestra una evolución diferenciada. Así, en agosto pasado, el salario de los trabajadores del sector privado registrado creció un 8,3%, mientras que el de los asalariados no registrados lo hizo en un 8,5%. En el caso de los del sector público, el incremento fue muy bajo respecto de la inflación: apenas un 6%, lo que implicó una contracción real del 5,7%.

La pérdida real de poder adquisitivo fue una constante este año. En la medición anual enero-agosto, el índice general creció un 75,9%. Los privados registrados lo hicieron en un 76,8%; los no registrados en un 63,8% y los del sector público en un 80,4%. Estos últimos asalariados lograron una levísima ventaja sobre la inflación, que acumuló entre enero y agosto un 80,2%.

En el año transcurrido entre septiembre de 2022 y agosto de este año, nuevamente el sector público le ganó a la inflación, al acumular una suba de salarios de 137,7% versus una inflación del 124,4%.

Pero los otros dos sectores no tuvieron tanta suerte: los salarios del sector privado registrado se incrementaron un 121,1% mientras que los de los no registrados lo hicieron en un bajísimo 95,1%. Hay que tener en cuenta que casi el 40% de la fuerza laboral se desempeña en esta modalidad de no registro.

El índice general subió un 121,8% en el período septiembre 2022-agosto 2023.