El acuerdo al que arribaron el gobierno nacional y la empresa OSDE el viernes pasado ayudará al lanzamiento de la CUS, ya que la firma no sólo aportará dinero fresco sino que, además, resignará créditos que tiene con el Fondo Solidario de Redistribución (FSR). Justamente, una parte de los fondos acumulados en el FSR están destinados a la CUS, con lo que cabe preguntarse si en algún punto se trata de la misma plata. El acuerdo entre el gobierno y OSDE es por un valor de 8000 millones de pesos, aunque según la denuncia original, reflotada por Swiss Medical en enero pasado, la evasión en la que incurrió OSDE sumaba el doble, unos 16 mil millones de pesos.

Notablemente, el juicio que abrió en 1998 la Superintendencia de Servicios de Salud, nunca tuvo sentencia de primera instancia siquiera. En los pasillos de OSDE se considera que el acuerdo era condición para allanar el terreno del ingreso de las prepagas en la CUS y tener la paz necesaria como para encarar la ampliación del universo de personas que se pueden atender en sus establecimentos, con costos a cargo del Estado. Ello forma parte de la discusión del lanzamiento del la CUS.