La Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y Premetro (AGTSyP, conocida como Metrodelegados) anunció una jornada de protestas en la línea B durante el viernes que incluirá liberación de accesos en algunas estaciones y un paro del servicio desde las 21 hasta el final del día, para exigir que el gobierno porteño «declare la emergencia» por el asbesto presente en los vagones. Esta medida se toma días después de un sorpresivo paro realizado por la UTA, a partir de la pelea entre un delegado gremial y un supervisor de la empresa concesionaria.

«Continuando con nuestro reclamo de reducción de la jornada, desabestización integral de la red de subterráneos y el cambio de las flotas contaminadas con asbesto, los trabajadores del subte continuamos con nuestro plan de lucha. Mañana jueves liberaremos accesos en la estación J. M. de Rosas y otras estaciones de la línea B entre las 20 y las 21, y luego desde las 21 paralizaremos el servicio de la misma línea hasta el final del día», informaron desde el gremio en un comunicado.

En ese sentido, alertaron sobre «la situación particular de la línea B, sobre la cual circulan dos flotas de trenes, ambas contaminadas con el mineral cancerígeno (prohibido desde 2001) y que, como indica la ley vigente y varios fallos judiciales, no deberían estar en uso por poner en riesgo la salud de trabajadores, usuarios y vecinos».

«Estos trenes deberían haber sido retirados de servicio y reemplazados por flota nueva y sin asbesto desde hace décadas. El Gobierno de la Ciudad y la concesionaria Emova desconocen nuestro pedido y son responsables de la afectación de la salud de por lo menos 75 trabajadores y la muerte de al menos 3 más por la exposición al asbesto», afirmaron.

Además, indicaron que «estas flotas son obsoletas (fabricadas entre los ´50 y ´70) y durante años no tuvieron el mantenimiento mínimo, lo que hace que tengan un funcionamiento precario y que sufran constantes averías y desperfectos que provocan incidentes, accidentes, demoras e interrupciones, además de ser un peligro latente para la seguridad de todos aquellos que utilizamos o trabajamos en la línea B».

«Frente a esto la empresa Emova desde hace semanas intenta, a través de anuncios y audios, responsabilizar a los trabajadores de la situación terminal que atraviesa la línea B», agregaron.

Además, subrayaron que «por todo esto estamos exigiendo al Gobierno de la Ciudad que se declare la emergencia de la línea B y que se programe un servicio acorde a esa situación hasta que se pongan en circulación nuevas formaciones libres de asbesto como venimos exigiendo desde nuestra organización y que deberían haber sido adquiridas hace 3 años».

«Frente a este cuadro de crisis sanitaria y emergencia del material rodante que es una verdadera bomba de tiempo bajo tierra, no descartamos que el servicio de la línea B sea afectado o interrumpido de manera indefinida debido a la desidia y falta de respuestas del Gobierno de la Ciudad y de la empresa Emova (antes Metrovías)», completó el documento difundido desde AGTSyP.