Memento (2000)

Memento, el primer gran clásico de Nolan.

Un hombre que sufre una extraña forma de amnesia que le impide crear nuevos recuerdos, siente que tiene que reconstruir sus últimos pasos en busca de un hecho traumático que al comenzar su búsqueda no sabe cuál es. Con escenas en color que avanzan en orden inverso y en blanco y negro que avanzan en orden normal, Nolan acompaña a Leonard (Guy Pearce) en su búsqueda desesperada. Así el director se adentra en tópicos del siglo que aún no lo son: la memoria, la identidad, la realidad y la manipulación. Tatuajes, fotos sin sentido aparente, recordatorios aparentemente insólitos (todos dispositivos que usamos hoy para no olvidarnos de tareas diarias) son sus migas a lo Hansel y Gretel para recordar quién es y qué quiere. Así y todo, ¿cómo puede confiar en su propia búsqueda si no recuerda lo que ha hecho ni a quién ha conocido?, ¿cómo puede saber si va en la dirección correcta si no sabe de dónde vino? Una estructura narrativa dislocada que después explotarán por momentos en exceso las series, abre un nuevo siglo, pero sobre todo un nuevo mundo: el mundo de Christopher Nolan.

Disponible en Mubi.



Batman: El caballero de la noche (2008)

Nolan le dio otra dimensión a Batman.

Si su salto al conocimiento masivo fue Memento, las multitudes lo convirtieron en ídolo cuando entregó una versión de Batman (que sería una trilogía) superior a la que había pergeñado el gran Tim Burton. La historia es archiconocida: cómo Bruce Wayne (Christian Bale) se convierte en Batman. Pero la que marca que Nolan está para hablarnos de las cosas más contemporáneas de este mundo es El caballero de la noche (y El caballero de la noche asciende en menor medida). Allí inventa un Guasón nunca visto, que presagia tiempos tan aciagos como los presentes con motosierras y tomas de Casa de Blanca incluidos, por eso de no escuchar los reclamos de abajo y creer que siempre la explicación propia es la mejor.

Disponible en HBO Max.



El origen (2010)

Di Caprio, otro gran aliado de Nolan.

Dom Cobb (Leonardo DiCaprio) se dedica a introducirse en los sueños de las personas y extraer sus secretos, en especial los del mundo de los negocios, para después venderlos con una ganancia extraordinaria. Pero lo que había empezado como una buena forma de espionaje y competencia industrial, ahora se le ha vuelto en su contra y los grandes consorcios lo tienen en la mira. No puede volver a los Estados Unidos donde están sus hijos y su mujer, pero el empresario Saito (Ken Watanabe) le ofrece una última misión a cambio de poder volver a casa: implantar una idea en el subconsciente del heredero de una multinacional, quien se ha convertido en un peligroso competidor para Saito. Una especulación fabulosa sobre la vida, la existencia, los sueños, de qué estamos hechos y de qué creemos que estamos hechos. Christopher Nolan vuelve a mostrar su vuelo cinematográfico pero más aún a corroborar la máxima de Einstein: la imaginación es más importante que el conocimiento. Una película tan intrincada como apasionante, con efectos que luego el mundo aplaudirá y gozará como nunca en películas como Dr. Strange.

Disponible  en Movistar Play.



Interestelar (2014)

Nolan propone el espacio como un escenario de historias desgarradoras.

Las más volada, atrevida y emotiva especulación filosófica que Nolan le ha dado al cine. En un futuro cercano la Tierra está al borde de la catástrofe ecológica y la humanidad se enfrenta a la extinción. El ex piloto de la NASA Cooper (Matthew McConaughey), que vive con sus dos hijos (un varón adolescente y una mujer pequeña) y su suegro en una granja, recibe un mensaje misterioso que lo lleva a una base secreta donde se le revela que existe un proyecto para salvar a la humanidad. Se trata de una misión interestelar que busca explorar un agujero de gusano cerca de Saturno que podría conducir a otros planetas habitables. Cooper acepta liderar la expedición, lo que implica dejar de ver a sus hijos para siempre sin garantía alguna de éxito. Su hija no está de acuerdo y lo despide con todo el dolor que se siente ante una traición. De ahí en más, lo que viene es una especulación al mejor estilo Nolan: teorías físicas y matemáticas relacionadas con reflexiones filosóficas sobre la naturaleza del amor, para hipotetizar que la quinta dimensión que existe en el espacio es la del amor.

Disponible en Amazon Prime, HBO Max y Movistar Play.



Dunkerque (2017)

Nolan y la historia no tan reciente.

Christopher Nolan se mete por primera vez con la historia real de la humanidad. Una derrota que fue victoria porque la historia tiene esos caprichos: lo que en su momento se vio y sintió como una humillación, el derrotero mostró que fue un gran triunfo: gracias a él Francia tuvo un liderazgo, el de Charles De Gaulle, y una resistencia, la maquí, dos episodios fundamentales para el triunfo final aliado. Pero Nolan se mete con el hecho puntual de la batalla, que es la evacuación de las tropas de infantería que Inglaterra había enviado a Francia para pelear contra Hitler y de los batallones franceses que también huían del avance nazi. Así, las embarcaciones civiles inglesas son convocadas por el gobierno de Winston Churchill para rescatar a la mayor cantidad de tropa posible que se encuentra varada en la costa de Dunkerque a merced de los aviones de la Luftwaffe, la Fuerza Aérea alemana, y del ejército de la Wehrmacht. La gran osadía política de Churchill de convocar a civiles que no escatimaron valentía y la firmeza de un oficial aún desconocido para el mundo como De Gaulle para no rendirse, en manos de Nolan dan la verdadera dimensión de una de las batallas más épicas de la historia. 

Disponible en Netflix y HBO Max.