El Trece viene atravesando un verdadero año terrible. Es que si 2023 no inventó la decadencia en la que el canal del Grupo Clarín se ve sumida, sin dudas la profundizó, y con creces. Hay de todo para mencionar: desde la partida de Marcelo Tinelli y la amenaza que supone el muy buen desempeño del Bailando en su pase a América TV; el fiasco de ATAV 2, que no pudo repetir el éxito que supuso la primera parte, allá en el prepandémico 2019, por lo que concluyó hace días; las idas y vueltas de la franja vespertina, con Alex Caniggia entrando en enero y saliendo de la pantalla en agosto; y ahora, a poco menos de dos meses de su estreno, la tira adolescente Buenos chicos enfrenta su primer movimiento estratégico para levantar un alicaído rating, justo después de que el programa fuera denunciado públicamente por incluir unas repudiables líneas de diálogo que se burlan de las personas con Síndrome de Down.

Como si no hubiera sido suficiente la demostración de xenofobia que hicieran en el programa de Fabián Doman respecto a los pueblos originarios, ahora la aparatosa ficción para “teenagers” que la productora de Adrán Suar estrenó el 11 de septiembre, puso en boca de uno de sus personajes una expresión fuertemente discriminatoria. Tal como se vio en el capítulo de Buenos Chicos emitido el 25 del mes pasado, el personaje de Diego (Jerónimo Bosia), le dice despectivamente a uno de sus amigos: “Para mí te sobran un par de cromosomas. ¿Te hiciste los estudios?’”.

Contundente, ASDRA condenó dichas expresiones a través de un comunicado en su página oficial y sus redes sociales: “ASDRA –Asociación Síndrome de Down de la República Argentina- manifiesta su rechazo al uso de la palabras discriminatorias hacia las personas con síndrome de Down en la novela Buenos Chicos, que se emite por El Trece. En el capítulo 11, emitido el pasado lunes 25 de septiembre, un personaje le dice a otro «Para mí te sobran un par de cromosomas. ¿Te hiciste los estudios?», e incurre así en un acto de discriminación, al hablar de falta de inteligencia haciendo referencia al síndrome de Down”.

Buenos chicos, la esperanza de El Trece que se diluye.

El Trece, ni disculpas

Hasta ahora, nadie de El Trece realizó un pedido público de disculpas al respecto, desconociendo, con su actitud, la gravedad del hecho. Sin embargo, de lo que sí se ocupó el canal comandado por Suar es de volver a mover, una vez más, su grilla, sarandeada como nunca en los que va del año. Luego de su debut en el prime time y del “subidón” habitual de los comienzos, Buenos Chicos fue desinflando la marca que rondó los 9 puntos para caer hasta los 5 y monedas. Ubicada en principio a las 21.30, antes de Los 8 escalones, desde el vamos la tira perdió contra Got Talent Argentina, y apenas amagó con rozar los números del Bailando. Los cambios de horario no están dando los resultados esperados y los rumores de un final anticipado se escuchan cada vez más fuerte. Hay un dato clave: las grabaciones de la serie no están terminadas, con lo cual se podría ajustar el guión para cerrarla en muchos menos capítulos de los pautados originalmente.

La serie que cuenta las desventuras y no tanto de un grupo de chicos, chicas, y los adultos y adultas que los rodean tiene un elenco que se destaca en más de un sentido: Gabriela Toscano, Luis Machín, Juan Palomino, Luciano Cáceres; y entre los más jóvenes, a Mora Peretti, Jerónimo Bosia, Tomás Kirzner y Carolina Unrein, entre otros. Pero conforme pasaron las semanas, la serie cayó hasta los 7 puntos, para luego descender hasta los 5 (y algunos dígitos más) que cuenta hoy. Con el final amargo, a fines de septiembre, de ATAV 2, la gerencia de la emisora del Grupo Clarín volvió a hacer enroques, para llevar al programa juvenil a las 23.15, despegándolo así de la competencia caliente contra Telefe y América.

Aunque fin de año está a la vuelta de la esquina, habrá que ver si el calendario logra que El Trece exorcice su seguidilla de repudiables actos con los que ofendió a diversos sectores de la sociedad, las malas decisiones a la hora de reconquistar a la audiencia con la ficción y su inútil recurso de toquetear la grilla para salvar sus errores.