La candidata de Revolución Ciudadana (RC) a la presidencia de Ecuador, Luisa González, ya no es ajena a la violencia política que impera en el país y aceptó la protección de las Fuerzas Armadas, tras recibir un alerta por un posible atentado en su contra. La dirigente correísta que disputará el balotaje del 15 de octubre con Daniel Noboa, de Acción Democrática Nacional (ADN). «He aceptado el apoyo de las Fuerzas Armadas para garantizar la seguridad y la democracia de los ecuatorianos», apuntó. El jueves fue detenido un hombre que supuestamente estaba involucrado en un atentado contra González. «Dice que tenía que entregar unas bombas y que el objetivo era Luisa González», relató. «Esto es muy preocupante, porque se afecta la democracia», manifestó González.

Tras la primera vuelta del 24 de agosto, y con los antecedentes violentos de los asesinatos a dirigentes, entre ellos el candidato por el Movimiento Construye, Fernando Villavicencio, el presidente Guillermo Lasso ordenó al Ejército ocuparse de la seguridad de los dos postulantes que avanzaron al balotaje. Frente a esto, González confirmó que posiblemente acepte usar chaleco antibalas, algo que se vio durante la campaña en la mayoría de los candidatos, pero que ella se rehusaba a hacerlo. «No puede ser que el discurso se quede en un chaleco, sino en la garantía que debemos tener todos los ciudadanos (…) Todos estamos en riesgo mientras no se vuelva a tomar el control del país», añadió.

González obtuvo 33,6% en la primera vuelta. Si bien era la favorita, su contendiente en el balotaje, Daniel Noboa, estaba en el radar de las consultoras lejos del segundo lugar, que logró con el 23,5%.