Parecía que se trataba de un baile más en la noche de Bariloche, ciudad acostumbrada a recibir futuros esgresados de Buenos Aires para celebrar y festejar durante una semana el fin de ciclo, el fin de una largo camino en el colegio secundario.

Sin embargo, el martes a la noche fue un baile de terror: un grupo de estudiantes de la Sociedad Escolar y Deportiva Alemana de Lanús asistió a un baile de disfraces con cruces esvásticas, tambén pintadas en el torso, y símbolos nazis (varios con bigotes de Adolf Hitler), lo que originó el enojo y la reacción de otro grupo de estudiantes del colegio judio ORT.

No tardaron en generarse peleas y empujones entre los alumnos de ambas instituciones hasta que todos resultaron expulsados del boliche Cerebro, uno de los más conocidos de la ciudad. Un día más tarde, llegó el pedido de disculpas.

«Estoy horrorizada, es un hecho repudiable, no alcanza con pedir disculpas, tendrán que reparar con acciones el daño», advirtió la directora de la escuela alemana, Silvia Fazio, al adelantar sanciones al regreso de los estudiantes.

La docente agregó: «hubo muchos filtros de adultos que fallaron, como los padres que acompañaban al grupo, los coordinadores, la gente del boliche, el chofer. Hay mucho para reflexionar».

En tanto, el miembro de la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA), Cohen Sabban, dijo que «no es ni un chiste ni una gracia, partamos de la base de que reflejan una ideología que culminó con 6 millones de judíos asesinados por los nazis. Si estos chicos tienen más de 16 años, les puede caber por ese hecho una pena de un mes a tres años de prisión porque lo que hicieron en Argentina es un delito».

El alcalde de Bariloche, Gustavo Genusso, lamentó el incidente: «Nos preocupa que jóvenes de nuestro país tengan esa actitud”.

Bariloche es una ciudad que también es conocida por haber sido elegida como refugio por varios oficiales nazis para huir de la justicia, como por ejemplo Erich Priebke, quien permaneció allí por cuatro décadas hasta que en 1995 fue extraditado a Italia donde fue condenado a cadena perpetua.