En una encuesta telefónica nacional de 1200 casos, que se realizó entre del 5 al 8 de agosto, la consultora Ibarómetro llegó a la conclusión de que aumentaron los sentimientos negativos respecto al futuro económico y que la llamada “herencia” del gobierno anterior pierde peso como argumento ante el ajuste del gobierno de Mauricio Macri para justificar los problemas económicos.

La imagen del gobierno sigue en bajada. Según el sondeo de Ibarómetro, la positiva decreció más de 3 puntos en relación a la medición de junio: hoy está en el orden del 47,6% contra el 51,4% de dos meses atrás. Y si se lo compara con diciembre, perdió 18 puntos en total. Apenas asumió, la administración de Macri tenía un 65,6% de imagen positiva.

 La encuesta muestra que “la estrategia discursiva del oficialismo sufre una pérdida de eficacia”. Puntualmente en la conceptualización de  la “herencia” (responsabilidad del Gobierno anterior) retrocede 8 puntos; mientras que la percepción en términos de “ajuste” (responsabilidad del Gobierno actual) crece 4 puntos”. La culpa de la herencia kirchernista bajó del 50% al 42% y la del ajuste macrista subió del 45% al 49%.

Un  48% cree que la gestión de Macri es mala o muy mala y otro 48% que es buena o muy buena, lo que marca un empate. El 4% restante no sabe/ no contesta. Sin embargo, al preguntar a los encuestados sobre la percepción general en la sociedad que despierta el macrismo, el 52% cree que es negativa y el 41% positiva. Los más críticos con la gestión son los jóvenes y en especial los habitantes del Conurbano. Por contraste, los mayores de 50 años y que viven el interior del país son los que más aprueban al gobierno.

El sondeo indaga en los motivos del respaldo a Macri. La principal razón de los que aprueban el gobierno sigue siendo la diferenciación con el kirchnerismo (50%) y no las medidas económicas y sociales que viene implementando el gobierno (24%). “La gestión propiamente dicha aún no consigue consolidarse como un atributo de peso en la evaluación del gobierno”, señala la consultora. En tanto, el estilo de gobernar y comunicar sigue perdiendo terreno (12%) y el liderazgo del presidente se mantiene, en el orden del 8%, pero en los mismos niveles que febrero. ¿A quién beneficia el macrismo? El 53% opina que a la clase alta; el 24,5% a la clase media; el 8% a la clase baja mientras que el 14% no sabe.

Con respecto a los sentimientos “inspira el futuro del país”, el 40% respondió que son “positivos” contra un 53,2% que dijo que son “negativos”. Según explicaron desde la consultora, “los sentimientos negativos, especialmente el temor y la incertidumbre, siguen dominando el clima anímico de los argentinos. El optimismo, por su parte, se mantiene estable en torno al 40%. Los mayores de 50 años y los aprobadores del  Gobierno Nacional son los únicos segmentos en los que predomina una mirada optimista del futuro”.

 Con respecto a las preocupaciones de los encuestados, se muestra que los problemas que predominan son la pobreza con un 18,4%, el desempleo en un 16,1% y la inflación con un 14%. El pesimismo económico se acentúa entre jóvenes, mujeres, residentes del AMBA y desaprobadores del gobierno nacional.  En tanto, sobre el rol que debería cumplir la oposición, el 52% pide que “le ponga límites” al gobierno, mientras que el 36% prefiere que “acompañe y dialogue”. El primer caso coincide con mayoría de votantes de Daniel Scioli en la primera vuelta de 2015 y, en el segundo caso, de Sergio Massa.