“Luchas tiene sentido”, exclama Eduardo López, secretario del gremio de UTE–CTERA. Su frase hace referencia al fallo del juez en lo Contencioso Administrativo N°18, Marcelo López Alfonsín, que le ordenó al Gobierno de la Ciudad que reabra inmediatamente la inscripción de vacantes para niños y niñas de 45 días a un año de edad, en la sala de lactario de la Escuela Infantil Nº 6 del Distrito Escolar Nº 6, para este ciclo lectivo 2019.

“Las representantes del gobierno nos han transmitido que la gestión de Horario Rodríguez Larreta ha decidido de forma indeclinable cerrar la sala de bebés en 2019 y hacerlo progresivamente hasta los 2 años inclusive”, denunciaron hace casi cinco meses los padres y madres. Y agregaron: “El mensaje fue que no puede haber niños de 3 años sin vacantes y por eso se procedía al cierre de los maternales que incluye la franja de los 45 días a 2 años”. Desde el ministerio de Educación, conducido por Soledad Acuña, justificaron la decisión en que el jardín se va a mudar a la flamante plaza Manzana 66, a pocas cuadras, en Jujuy y Belgrano. Sin embargo, el futuro establecimiento arrancará desde la sala de 3. No contendrá lactario.

Según informó en su momento Nueva–Ciudad, no se trata de una medida aislada: el Ejecutivo porteño planea hacer lo propio en los jardines del hospital Durand y del Vélez Sarsfield, y el cierre de los maternales va en línea con el crecimiento de los CPI, que no dependen del sistema educativo sino del Ministerio de Hábitat y Desarrollo Humano, con un perfil donde lo pedagógico queda en segundo plano, y los sitios utilizados pueden ser desde casas hasta depósitos, no necesariamente jardines construidos para tal fin.

Al ser enterados de la noticia, la comunidad educativa del Ramos Mejía, desde padres hasta docentes, iniciaron un plan de lucha que llegó hasta la justicia, donde presentaron una cautelar para que el lactario pueda seguir funcionando. El amparo finalmente fue aceptado por el juez Alfonsín, luego de la audiencia desarrollada a principios de semana, que derivó en una inspección ocular el miércoles pasado, en la cual el magistrado constató que la sala se encuentra en perfectas condiciones para funcionar. Así llegó al fallo de este viernes donde ordena su reapertura.   

“Hay 45 familias que se inscribieron durante este verano y reclaman el derecho establecido en la Constitución de la Ciudad de tener una vacante asegurada en el nivel inicial. Es inadmisible que se cierre una sala de jardín maternal cuando según los últimos datos hay 13 mil niños sin vacante en ese nivel educativo”, apuntó López. Y completó: “A pocos días del inicio del ciclo lectivo casi 27 mil niñas y niños cuyas familias eligen la educación pública están sin vacantes en el Nivel Inicial. La gestión de Rodríguez Larreta no sólo reduce el presupuesto educativo año a año, sino además, lleva adelante una política de cierre de escuelas”.