“Familiares, amigos y asociados del presidente, de su jefe de gabinete y de su secretario Legal y Técnico ocupan lugares destacados en la lista de personas que se acogieron al blanqueo de bienes no declarados. Entre ellos figuran el hermano y socio presidencial, Gianfranco Macrì, el primo del jefe de gabinete de ministros, Alejandro Jaime Peña Braun; el socio y amigo de Macrì, Nicolás Caputo; el emprendedor Marcelo Mindlin, quien el mes pasado anunció que compraba la constructora de la familia presidencial, hasta entonces en manos del primo Ángelo Testaferra y un cuñado del secretario Legal y Técnico de la Presidencia, Pablo Clusellas Zorraquín”. Así comienza el extenso artículo firmado por el firma el periodista y presidente del CELS Horacio Verbitsky, una denuncia muy fuerte y detallada sobre personas del círculo más intimo del presidente Mauricio Macri, y la medida que impulsó el gobierno nacional para incorporar fondos no declarados.

La denuncia especifica que ese grupo de personas relacionado al más cercano círculo de Macri y sus funcionarios nacionales blanquearon 132,5 millones de dólares. Por caso, el propio hermano del mandatario, Gianfranco, que blanqueó 35,5 millones de dólares lo que equivale a 622 millones. Verbitsky recuerda que en su declaración jurada, Mauricio Macri incluyó bienes por 82,6 millones más los 44 del un fideicomiso ciego, al tiempo que denuncia que con su maniobra blanqueadora, Gianfranco sumaría cinco veces más patrimonio que su hermano.

Otro caso denunciado por el periodista en su artículo publicado en Página/12, es el de Marcelo Mindlin. Se trata del comprador de la empresa IECSA, que en su momento pero perteneciera al primo del presidente, Angelo Calcaterra: el empresario blanqueó 44 millones de dólares, que significativamente es una suma similar por la que compró la constructora.

Varios casos se detallan minuciosamente. Uno de ellos es el de Nicolás Nicky Caputo, íntimo amigo del presidente, “socio en la primera empresa que inició aparte del holding familiar (Mirgor, fabricante de aire acondicionado para automotores), testigo de su última boda y asesor de facto de la presidencia”, a la vez que recurrente vencedor en licitaciones de contratos de obra pública, quien declaró 26,5 millones de dólares.

En la denuncia, otro de los que figura es Pablo Clusellas Zorraquín, el secretario Legal y Técnico de la presidencia. Verbitsky lo califica como “es una pieza fundamental del universo macrista. Compañero de Macrì desde la primaria, abogado y directivo de SOCMA, no sólo es el último filtro antes de la firma presidencial. También fue quien organizó el fideicomiso opaco, a cuyo frente quedó José María Fernández Ferrari, el socio del escribano general del gobierno, Carlos D’Alessio, quien renunció a ese cargo para ocultar el conflicto de intereses”. El marido de Susana, la mayor de los cinco hermanos de Clusellas Zorraquín es Manuel Lucio Torino Ortíz, quien blanqueó 353 millones de pesos. “Pablo Clusellas Zorraquín es revisor de cuentas del Buenos Aires Golf Club, que preside Gianfranco Macri”, según se informa en el artículo.

Otro caso de familiares de funcionarios es el de Alejandro Jaime Peña, quien es primo del jefe de gabinete de ministros, Marcos Peña, y se acogió al blanqueo con 6,2 millones de dólares.

“Estos 2319 millones de pesos, o 132,5 millones de dólares, pueden parecer una suma exigua, comparada con los 116.000 millones de dólares que blanquearon 254.700 CUITs distintos, de acuerdo con los datos oficiales divulgados por el ministro Nicolás Dujovne y el recaudador Alberto Abad, de los cuales 96% corresponden a personas físicas y 4% a personas jurídicas (…) pero adquieren otra dimensión si se recuerda que Maurizio Macrì (sic) declaró bienes por 82,6 millones de pesos, más otros 44 en el fideicomiso, en total 126,6. Es decir que su hermano golfer blanqueó cinco veces más. Esto ratifica la conocida práctica de la familia presidencial, que ha sido un actor destacado en la constitución de sociedades offshore y la fuga de capitales”.