La ministra de Seguridad de la Nación, Sabina Frederic aseguró este viernes: «El material represivo que Bullrich había comprado para el G20 terminó en Bolivia sin ninguna documentación respaldatoria».

El dato fue confirmado a Tiempo Argentino por el secretario de Articulación Fed de la Seguridad Gabriel Fuks. Según publicó este diario en noviembre de 2018, semanas antes de la realización del G20 en Argentina, el gobierno de Mauricio Macri había adquirido para cuestiones de seguridad en las calles, con el mando de la ministra Patricia Bullrich, a través de licitaciones públicas de 180 escopetas, y 15 millones de municiones de goma anti-disturbio; 2000 proyectiles de gases lacrimógenos, 9100 chalecos policiales multiamenaza; 6000 vallas de contención; 2 millones de cartuchos de bala 9 milímetros; 3150 juegos de cascos; escudos; máscaras antigás y bastones para policías y gendarmes; 4900 precintos plásticos de seguridad que se utilizan a modo de esposas para detenidos. Se consiguió además un sistema para garantizar la seguridad informática.

A partir de toda la documentación que está surgiendo de la investigación en Argentina sobre el eventual apoyo del gobierno de Macri al golpe de Estado en Bolivia, Frederic señaló que: «Hay un fax que envió un gendarme donde se dice que se va a ampliar la carga de armamento a Bolivia 70.000 municiones que no fueron consignadas ante la Fuerza Aérea».  

En diálogo con el programa de radio Crónica Anunciada, que se emite por FM Futurock, Frederic se refirió a la investigación por contrabando agravado de los ex funcionarios del gobierno de Macri con Bolivia: «Hay mucha documentación que ratifica nuestra denuncia por el contrabando de armamento represivo a Bolivia», al tiempo que expresó: «Está comprobado que la partida de armamento antitumulto que compró Bullrich es el que apareció en Bolivia».

«No hay manera de que el armamento a Bolivia haya salido de manera legal», señaló Frederic, y confirmó: «Aguad autorizó el vuelo del Hércules a Bolivia». «Son 4 los gendarmes que fueron pasados a disponibilidad por el envio de armamento a Bolivia», aclaró la Ministra. Y concluyó: «Bullrich no volvió a hablar del tema Bolivia desde que apareció la documentación. Se tiene que guardar y encontrar justificaciones para la Justicia, están complicados».