El ministro de Seguridad porteño Marcelo D’Alessandro anunció en la tarde del martes que se tomará una «licencia temporal», tras el escándalo desatado por una serie de chats que vinculan al PRO con la justicia. Esta filtración -adelantada por Tiempo– provocó también una serie de internas en el oficialismo porteño.

«Acabo de hablar con el jefe de gobierno (Horacio Rodríguez Larreta) y el jefe de gabinete (Felipe Miguel) a quienes agradezco que me hayan entendido. En las últimas semanas, estamos siendo objeto de una operación infame, de grupos de tareas que realizan inteligencia sobre las personas. Montan situaciones que no son reales, editan. No importa ya qué es verdad o mentira; quieren crear una crisis institucional. Estoy más firme que nunca», apuntó D’Alessandro.

Sobre el motivo de la licencia, el cuestionado ministro expresó: «Necesito una licencia para ordenar mis cosas personales y contener a la familia. Y también preparar la defensa de cada una de estas operaciones infames. No estoy renunciando, sino una licencia temporaria. Agradezco el apoyo del jefe de gobierno y a la doctora (Elisa) Carrió.

A continuación, el jefe de gobierno porteño Felipe Miguel aseguró que él mismo se hará cargo del área durante la ausencia de D’Alessandro y le brindó su apoyo.

Las investigaciones judiciales derivadas de la filtración de los chats están relacionadas con un viaje que hizo al sur del país con jueces y ejecutivos de medios y con el intercambio de chats con un colaborador del presidente de la Corte, Horacio Rosatti, y con un empresario que explota el servicio de grúas que acarrean vehículos en infracción, entre otros.