El vocero presidencial, Manuel Adorni, informó este martes que el Gobierno cambiará el nombre del actual Centro Cultural Néstor Kirchner, ubicado en el centro porteño.
«Se ha decidido finalmente cambiar el nombre al Centro Cultural Néstor Kirchner. Dejará de llamarse como tal y, efectivamente, se le dará paso a un nuevo nombre», señaló Adorni.
Respecto al nombre elegido como reemplazo, el Gobierno aún no lo definió, aunque el vocero ya llamó al espacio cultural como «ex CCK«.
?️ "Se ha decidido finalmente cambiar el nombre al Centro Cultural Néstor Kirchner. Dejará de llamarse como tal y, efectivamente, se le dará paso a un nuevo nombre", informó el vocero presidencial, Manuel Adorni. pic.twitter.com/O4a63XjxHu
— Tiempo Argentino (@tiempoarg) March 26, 2024
«La decisión está tomada en virtud de que no exista más como tal, no tenemos todavía definido el nombre, cuando lo tengamos se los vamos a comunicar», dijo el vocero.
Reinaugurado en el año 2015 en el edificio del antiguo Palacio de Correos, el CCK es hoy el centro cultural más grande de América Latina y el cuarto a nivel global, con nueve pisos de oferta cultural.
Entre sus puntos más destacados sobresale «La Ballena Azul«, una gran sala de conciertos que ocupa el centro del CCK con capacidad para 1950 espectadores y un nivel acústico de excelencia. Hoy, es el hogar de la Orquesta Sinfónica Nacional de Argentina.
Inaugurado en el 2015 por la entonces presidenta Cristina Kirchner, viuda del expresidente cuyo nombre porta el centro cultural, el CCK también tiene una amplia cúpula de cristal en el piso más alto, donde se realizan eventos musicales con la impresionante vista de la ciudad de fondo.
Además, en sus nueve pisos tiene cinco otros auditorios para teatro y conciertos, 18 halls para la lectura de poesía, arte performativo y otros eventos, 40 espacios con arte y galerías de historia, 16 salas de ensayo y dos terrazas.
Gabriel Medina Ernst
27 March 2024 - 00:56
Desde la toma de la Casa Rosada el 10 de diciembre, nuevamente -a mi criterio- con engaño electoral al pueblo, hablando de una casta, sin mencionar quienes eran en realidad esa casta, fueron cambiados los nombres de nuestras instituciones estatales distorsionando sus funciones y sentido. Así, nuestro ministerio se pretende llamar Ministerio de Capital Humano, degradando indelegables funciones primarias de un gobierno democrático. Enterado hoy que el CCK también sufrirá tal degradación de su nombre, he decidido, eludir esas decisiones y mantener en mis diálogos verbales, escritos y toda forma de expresión, los nombres de Ministerio de Cultura de la Nación y del Centro Cultural Néstor Kirchner, o su sigla CCK, pese a Milei y su runfla. Asimismo, con el resto de los organismos del Estado, incluso los que se cierren, porque sin duda volverán a abrirse. Espero que otros compañeros y compañeras me acompañen. No podemos también regalarle el símbolo de los nombres a estos infames. Los que hacen –advenedizamente- de funcionarios me querrán corregir. A los que hay que corregir es a ellos.