El Sindicato Único de Trabajadores del Neumático (SUTNA) decidió profundizar las medidas de fuerza contra la política de la patronal de FATE que, además de avanzar con despidos, pretende modificar condiciones de trabajo en forma unilateral vulnerando el convenio colectivo vigente.

Luego del paro general de todo el gremio realizado el 26 de marzo por el empantanamiento de la paritaria ante la propuesta de aumento nulo para enero y febrero de parte de las cámaras, los trabajadores de FATE y su comisión interna decidieron dar inicio a un paro de 24 horas el sábado 29 que, asamblea general mediante, se extendió hasta el martes 1 de abril a las 6 de la mañana y se reanudará el jueves 3 de abril por un lapso de 48 horas.

Es que, más allá del conflicto de orden general que lleva adelante el sindicato en el marco de la discusión salarial, FATE decidió implementar en los hechos la política que pretendía desenvolver a partir de la aprobación del Proceso Preventivo de Crisis que presentó la empresa, el sindicato rechazó y, ante la ausencia de los requisitos que exige la legislación vigente, la Secretaría de Trabajo no pudo avalar.

Sin embargo, y a pesar de la incapacidad de exhibir tres balances consecutivos con pérdidas que habiliten ese recurso extraordinario (la documentación exhibida muestra ganancias de casi U$S 200 millones), la patronal de capitales nacionales decidió avanzar igual con su política de ajuste y vulneración de los convenios colectivos sin acuerdo con la parte gremial.

El SUTNA emitió un comunicado en el que asegura que “a partir de la tarde del día viernes 28 de marzo, a través de Capataces, Jefes y Gerentes, (la empresa) saliera ilegalmente a presionar a los trabajadores para que firmen un cambio de sistema de trabajo, en una suerte de firma bajo extorsión de un cheque en blanco”.

La respuesta del sindicato consistió en realizar “asambleas de turno correspondientes para responder colectivamente a esta provocación de la patronal”. Como represalia la compañía decidió “en forma ilegal y sorpresiva producir despidos de trabajadores, cuyo número no podemos determinar aún, pero ya son cinco compañeros los que no pudieron ingresar a planta”. Para el sindicato, las cesantías, “fueron comunicadas improcedentemente en la puerta de planta que, mediante el artículo 247, quedaban desvinculados, cuando este tipo de artículo es inaplicable, lo que demuestra la profundidad de la saña con que la patronal ha actuado”.

En el marco de la medida de fuerza dispuesta los trabajadores se convocaron en la planta y marcharon hasta la avenida Márquez y Panamericana con el propósito de visibilizar el conflicto y dar fuerza a la medida que tuvo un acatamiento total.

En la misma línea, la multinacional Bridgestone que también había sustanciado un pedido de proceso preventivo de crisis que también fue rechazado por la Secretaría de Trabajo que lo juzgó improcedente, avanzó con unos 60 despidos unilaterales.