Al tiempo que en Estambul representantes ucranianos y rusos mantienen conversaciones para un acuerdo que ponga fin a la guerra que comenzó en febrero de 2022 -y que llevó al mayor intercambio de prisioneros hasta ahora-, el Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU) confirmó la autoría de una nueva «operación especial» sobre el puente de Crimea con la colocación bajo el agua de más de una tonelada de explosivos que provocó daños en la infraestructura, estratégica para la conexión entre la península y el territorio de Rusia. Esto se suma al masivo ataque con drones en las bases de Irkutsk y Múrmansk del domingo.

El SBU divulgó imágenes de la explosión en el puente de Kerch y explicó que llevaba meses planeando esta operación, que consistió en la colocación de bombas en los pilares del puente. El primer artefacto se activó poco antes de las 4.45 (hora local) de este martes y provocó «graves daños» en la base, según el informe.

Según el SBU, el puente se encuentra «en estado de emergencia», si bien las autoridades rusas no dieron su versión sobre lo ocurrido. Kiev recordó que, con este ataque, son ya tres los perpetrados sobre este puente, en el que Ucrania ve «un objetivo absolutamente legítimo» por su importancia para el abastecimiento de tropas rusas.

La mano de las OTAN

El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, se reunió mientras tanto con el secretario general de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), Mark Rutte, al margen de la Cumbre de los Nueve de Bucarest y Países Nórdicos en Vilna, Lituania.  “Le informé sobre los acuerdos logrados durante las conversaciones en Estambul sobre el intercambio de prisioneros y el regreso de los niños, así como sobre el rechazo de Rusia al paso más simple posible: un cese al fuego incondicional”, dijo Zelenski.

Zelenski y Rutte también discutieron las próximas medidas diplomáticas y el apoyo de defensa para Ucrania. Más tarde, ese mismo día, Zelenski anunció que Ucrania fue invitada a la Cumbre de la OTAN programada para el 24 y 25 de junio en La Haya.

Cautela en Estambul

Las autoridades de Rusia descartaron, en tanto, “avances inmediatos» tras las conversaciones en Estambul, a pesar de que Moscú hizo entrega de un memorando que recoge su propuesta para lograr un alto el fuego entre las partes.

El portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, dijo que «no esperan decisiones inmediatas» a raíz del encuentro del lunes, si bien la cita permitió alcanzar «determinados acuerdos» que describió como «importantes». Para Peskov, el memorando ruso busca «arrancar de raíz las causas del conflicto», si bien admitió que la cuestión de «llegar a un acuerdo es completa y aborda muchos asuntos».

El documento entregado por Rusia tras una hora de conversaciones en Turquía propone una tregua a largo plazo en algunas zonas y la retirada de las fuerzas ucranianas de las provincias de Jersón, Zaporiyia, Donetsk y Lugansk.

El jefe de la delegación rusa, Vladimir Medinsky, confirmó a su turno que en una segunda parte del memorándum se describe los pasos para “posibilitar un verdadero alto el fuego” y anunció que por lo pronto “entregaremos unilateralmente 6.000 cuerpos congelados de soldados ucranianos a la parte ucraniana. La próxima semana, devolveremos estos cuerpos a la parte ucraniana para que puedan descansar con dignidad”.

Mendinsky dijo también que se acordó el mayor intercambio de prisioneros hasta la fecha. “Todos los soldados gravemente heridos y enfermos serán intercambiados de forma universal. Este es un gesto humanitario de nuestra parte. El mismo enfoque —de forma universal— se aplicará al intercambio de soldados jóvenes menores de 25 años. El cupo total de intercambio será de al menos 1.000 personas de cada parte, posiblemente más”.

En relación con las denuncias por el presunto secuestro de niños ucranianos que llevó a una acusación en la Corte Penal Internacional contra Vladimir Putin, el negociador ruso dijo: “Luego de muchas demoras por fin obtuvimos una lista completa. Como pueden ver, no son 1,5 millones, ni siquiera 20.000 nombres. Incluye 339 nombres. Investigaremos cada caso”. Pero aseguró que se trata de niños “rescatados por nuestros soldados, a menudo a costa de sus vidas, sacados de zonas de combate y llevados a un lugar seguro. Buscamos a sus padres. Si se encuentra a los padres, los niños serán devueltos”.

Bannon contra el ataque ucraniano

El ideólogo de la extrema derecha internacional y ex estratega jefe de la Casa Blanca durante el primer mandato de Donald Trump, Steve Bannon, fustigó al senador Lindsey Graham (republicano por Carolina del Sur), al que acusa de estar alineado con el presidente Zelenski y de «provocar disturbios» en Ucrania para impedir cualquier acuerdo de paz.

Bannon habló luego de conocerse el ataque con drones contra la flota aérea rusa, que destruyó más de une decena de aviones, lo que hace temer por una respuesta de Moscú de imprevisibles consecuencias.

Para Bannon, Trump debería condenar el ataque militar y a Graham, que celebró el operativo ucraniano del que se jactan los servicios de ese país. “Lindsey Graham está por allá diciendo: ‘Oigan, olvídense de Trump. Tengo la Cámara de Representantes y el Senado. Vamos a aprobar (un nuevo paquete de sanciones a Rusia). Verán algo en un par de días’”, continuó.

«Buscan la Tercera Guerra Mundial», sostiene Bannon.

alg con Xinhua, Europa Press y Sputnik