Militantes y dirigentes de la Unión de Trabajadores y Trabajadoras de la Economía Popular (UTEP) se concentrarán este jueves en las inmediaciones del Ministerio de Economía para «defender el trabajo de la economía popular«. En paralelo, cooperativistas del Programa Agua + Trabajo y Cloaca se movilizarán al mediodía a la sede de Aysa en reclamo de salarios atrasados, entre otras demandas.

Tras la movilización realizada ayer a la sede de Capital Humano, la UTEP volverá a movilizarse este jueves a partir de las 10 a la sede de Economía, ubicada en Hipólito Yrigoyen 250 de esta capital, «como una continuidad de nuestro plan de lucha para defender el trabajo de la economía popular», dijo a Télam Alejandro «Peluca» Gramajo, secretario general de esa organización gremial.

«Nos movilizamos porque el Gobierno y su ministro de Economía, (Luis) Caputo, decidieron terminar con las obras en los barrios populares, el programa Mi Pieza y el acceso a lotes con servicios», dijo Gramajo y advirtió que las «obras vigentes en distintos puntos del país están en peligro por el ajuste del Gobierno, no habrá fondos para nuevas obras, sorteos de Mi Pieza, ni nuevos terrenos para los vecinos».

Cooperativistas movilizan a Aysa

Por su parte, trabajadores cooperativizados del Programa Agua + Trabajo y Cloaca + Trabajo y Vinculaciones realizarán hoy su propia protesta a la sede de Agua y Saneamientos Argentinos (Aysa), en reclamo de «el retraso en los pagos de sueldos, el congelamiento de los salarios desde octubre y la amenaza del cierre del programa de trabajo», entre otras demandas.

Según informaron a Télam voceros de los trabajadores, esta protesta se desarrollará a partir de las 12, en la sede de AYSA, ubicada en Tucumán 752, de Capital Federal.

«Nos vamos a movilizar por nuestro trabajo y nuestras condiciones de vida», informaron los trabajadores cooperativizados.

En ese marco, explicaron que «los trabajadores y trabajadoras del Programa Agua + Trabajo y Cloaca + Trabajo y Vinculaciones vamos a protestar y a reclamar por retraso en los pagos de sueldo, el congelamiento de los salarios desde octubre y la amenaza del cierre del programa de trabajo, del que no solo viven más de dos mil familias sino que ha permitido el acceso a agua potable y la red de cloacas a barrios enteros».

«El éxito del programa, constatado por las distintas gestiones que pasaron en la última década y media está constatado sobradamente. Más de un millón de conexiones a la red de agua y cientos de miles de conexiones de cloacas en distintos distritos del conurbano así lo prueban», destacaron finalmente.