El jefe del Ejército israelí, Eyal Zamir, nombró a casi una treintena de militares en nuevos cargos condicionados a la aceptación del ministro de Defensa, Israel Katz, quien adelantó que los rechazaría, en un cruce que se relaciona directamente con el anunció del primer ministro Benjamin Netanyahu de ocupar totalmente la ciudad de Gaza, algo a lo que el alto jefe militar se opone.
«La reunión sobre la dotación de personal celebrada por el jefe del Estado Mayor se llevó a cabo en contra de las instrucciones del ministro de Defensa y sin coordinación ni acuerdo previos, lo que supone una violación del procedimiento establecido. Por lo tanto, el ministro de Defensa no tiene intención de debatir ni aprobar los nombramientos o nombres que se han publicado», indicó Katz, según un comunicado que publicó el canal israelí Arutz Sheva del que se hicieron eco otros medios israelíes. «El jefe del Estado Mayor deberá coordinarse previamente con el ministro de Defensa antes de debatir estos u otros nombramientos futuros», agregó.
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), en cambio, replicaron con otro comunicado en el que Zamir insiste en que «la discusión se programó con antelación» y subraya que «es la única autoridad competente en materia de normativa para nombrar a los comandantes con rango de coronel o superior en las FDI». «El ministro tiene la autoridad para aprobarlos o rechazarlos«, agregó.
Entre los nombramientos, detallados en un comunicado del propio Ejército en su página web, destacan los cargos asignados al general de brigada Manny Liberty, que comandaba hasta ahora la Inteligencia militar de operaciones y pasa a la 98º división, el también general de brigada Manor Yanai, que será el jefe de las fuerzas terrestres, y a los coroneles Or Vollozinsky y Eli David, que asumirán el mando de los cuerpos de tanques e ingenieros, respectivamente. Además, el coronel Liron Betito «liderará la División de Gaza».
«Se trata de una discusión sobre la dotación de personal, cuyo núcleo son las funciones operativas sobre el terreno para las que se nombró a los comandantes de las brigadas de campo que han comandado y dirigido desde el estallido de la guerra en varias zonas de operaciones», diceeste comunicado.
Las designaciones se produjeron apenas tres días después de que el primer ministro, Benjamin Netanyahu, anunciase la aprobación en su gabinete de seguridad de sus planes para la ocupación de la ciudad de Gaza y el «control de seguridad» del enclave, una medida que due rechazada por la ONU, por ONG y por países de todo el mundo, además de las autoridades en la Franja de Gaza y Cisjordania.
El contexto también resulta extremo, a raíz del rechazo internacional tanto a la brutal ofensiva, que ya causó cerca de 61.000 muertos en la Franja desde los ataques de Hamás del 7 de octubre de 2023, como por la hambruna a que es sometida la población. El asesinato de seis periodistas palestinos generó una nueva ola de repudios incluso en países cuyos gobiernos sostuvieron a Netanyahu en una política de genocidio que condena incluso el Tribunal Penal Internacional de La Haya.
Así, el ministro de Exteriores de Irán, Abbas Araqchi, atribuyó el ataque mortal contra seis periodistas palestinos en ciudad de Gaza al «pánico» de Israel, afirmando que está «denostado mundialmente (y) va cuesta abajo (…) Se trata de fuerza? ¿O del pánico ante un régimen denostado mundialmente que va cuesta abajo?», dijo en su cuenta de la red social X.
Israel just carried out targeted assassinations of several more accredited and high-profile Palestinian journalists. Is that strength? Or the panic of a globally reviled regime that is going downhill?
— Seyed Abbas Araghchi (@araghchi) August 11, 2025
When all this is over, the world will remind Western governments' of their… https://t.co/OKFNIxbHPY
El jefe de la diplomacia iraní aseguró en el mismo mensaje que «cuando todo esto termine, el mundo recordará a los gobiernos occidentales su complicidad en estas atrocidades«. «Su vergonzoso silencio es ensordecedor», argumentó.
También el Ministerio de Exteriores de Jordania cuestionó el asesinato, con un comunicado en el que repudia «en los términos más enérgicos los ataques sistemáticos» de Israel contra informadores en la Franja de Gaza.
Por su parte, el primer ministro y titular de Exteriores de Qatar, Mohamed bin Abdulrahmán al Thani, denunció estos ataques «deliberados» de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) en un escueto mensaje en redes sociales en el que ha lamentado «la incapacidad de la comunidad internacional y sus leyes para detener esta tragedia».
Los periodistas, entre los que se encontraba Anas al Sharif, uno de los reporteros de Al Yazira más conocidos por su cobertura del conflicto, murieron por el impacto de un proyectil israelí contra la carpa en la que se encontraban, ubicada a las afueras del hospital de Al Shifa.
El número de muertos por desnutrición en medio de la crisis alimentaria en la Franja de Gaza aumentó a 227, incluidos 103 menores, comunicó este martes el Ministerio de Salud de Gaza. «El Ministerio de Salud de la Franja de Gaza registró cinco muertos de hambre y desnutrición en las últimas 24 horas, incluidos dos niños. Esto eleva el número total de muertos de hambre y desnutrición a 227, incluidos 103 niños», publicó el ente en las redes sociales.
Según las autoridades de Gaza, desde principios de 2025, 173 personas murieron de hambre en Gaza, 50 personas en 2024 y cuatro más fallecieron el año anterior.
La guerra en la Franja de Gaza estalló después de que miles de palestinos liderados por Hamás atacaran el 7 de octubre de 2023 el sur de Israel, matando a unas 1.200 personas, la mayoría civiles, dejando cerca de 5.500 heridos, y tomando a 251 rehenes.
La cifra de gazatíes muertos en la guerra que comenzó hace un año y diez meses supera los 61.400 y el número de heridos está por encima de los 153.500, según los datos del Ministerio de Salud del enclave.
A esta lista de rechazo contra la política de exterminio se suman los gobiernos europeos, Australia, Canadá y la mayoría de los países latinoamericanos -no así la Argentina de Javier Milei- e incluso dentro de Israel, donde va creciendo un clima de oposición a este tipo de aventuras criminales. De todas maneras, el gobierno aún cuenta con apoyos como por ejemplo de la principal central sindical Histadrut, que adelantó que no se unirá a la huelga general convocada para el 17 de agosto en protesta por la guerra y la aprobación por parte del gobierno de Israel de un plan para la toma militar de la ciudad de Gaza.
«Si supiera que una huelga –no de un solo día, sino más larga– pondría fin a este asunto, detendría la guerra y traería de vuelta a los rehenes, la lanzaría con todas sus fuerzas», declaró el presidente de la Histadrut, Arnon Bar-David.
El dirigente sindical argumentó porque no se unirán a la huelga, al afirmar que «desafortunadamente, y aunque mi corazón rebosa de ira, no tiene ningún resultado práctico«.
La decisión se tomó tras una reunión de Bar-David con altos representantes del sector empresarial y representantes de las familias de los rehenes, quienes encabezan la convocatoria de la huelga programada para el domingo.
alg con Europa Press, NA y Sputnik