Muriel Bowser, alcaldesa del distrito federal de EEUU, mostró resquemor pero no sorpresa ante la decisión del presidente Donald Trump de desplegar la Guardia Nacional en Washington D.C y federalizar a la Policía de la ciudad. «Aunque la medida tomada es inquietante y sin precedentes, no puedo decir que, dada la retórica del pasado, nos haya sorprendido del todo«, afirmó en una rueda de prensa en la que abogó por la «plena condición de estado para el Distrito de Columbia», ante lo que califica como un «frágil» acceso a la democracia.

Bowser dijo igualmente que esta dispuesta a colaborar con el Gobierno federal «para que haga lo que debe hacer por nuestra ciudad, lo que incluye garantizar que contamos con los jueces que necesitamos, garantizar que todos los parques federales reciben apoyo, no solo en materia de aplicación de la ley, sino también con otras actividades limpias y seguras, y garantizar que nuestra economía cuenta con el apoyo de medidas federales racionales».

«Puedo decir a los residentes de D.C. (Distrito de Columbia) que seguiremos gestionando nuestro Gobierno de una manera que les haga sentir orgullosos. Equilibraremos nuestros presupuestos. Desplegaremos nuestros servicios. Nuestros hijos comenzarán las clases el 25 de agosto«, ha agregado la regidora.

Donald Trump, había anunciado el lunes que desplegará la Guardia Nacional en Washington D.C y federalizará a la Policía de la capital para combatir el delito. «Hoy es el Día de la Liberación en D.C y vamos a recuperar nuestra capital», dijo el magnate en una rueda de prensa celebrada desde la Casa Blanca en la que dijo que el objetivo es «rescatar a la capital» del crimen, de «histórica».

Trump invocó la Ley de Autonomía de 1973, que permite tomar el control de la Policía si se determina que existen «condiciones especiales consideradas de emergencia» y nombró al jefe de la Administración de Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés), Terry Cole, como comisionado federal interino del Departamento de la Policía Metropolitana de Washington D.C.

Trump definió a Washington como «un santuario para los criminales» y cargó contra el Partido Demócrata, asegurando que la ciudad está llena actualmente de «bandas violentas y criminales sanguinarios, turbas errantes de jóvenes desenfrenados, drogadictos y personas sin hogar«.

Trump explicó que los efectivos de las fuerzas de seguridad llevarán a cabo «operaciones dirigidas contra a pandillas conocidas, traficantes de drogas y redes criminales». «Traeremos a los militares si es necesario«, ha asegurado.

Asimismo, anunció cambios a la ley sobre fianzas para que «alguien que asesina» a otra persona no quede «libre sin fianza en efectivo antes de que acabe el día», mientras que ha planteado que se reemplazará a aquellos jueces que no cumplan con sus responsabilidades y dejen libres a los delincuentes.

La ciudad capital de Estados Unidos, oficialmente denominada Distrito de Columbia o Washington D. C. tiene el status que tenía Buenos Aires hasta 1994. Es una entidad diferente a los cincuenta estados que depende directamente del Gobierno federal. Fundado el 16 de julio de 1790, recién en 1973 obtuvo una cierta autonomía que le permitió elegir desde entonces a su propio alcalde. Sin embargo, y a pesar de que le rigen todas las disposiciones federales en cuando a lo impositivo y leyes civiles, solo tiene en el Congreso de la Nación un representante, que se llama delegado, que tiene voz pero no voto. A esta apuntaba Bowser en su reclamo.

alg con Europa Press y NA