De una enorme vitalidad y dueña de un gran sentido del humor y de una gran audacia, Luisa Valenzuela comenzó su carrera literaria en un momento en que las mujeres tenían poco protagonismo en el campo literario. Ella abrió un camino a través de su voz feminista y política.
A los 87 años, Valenzuela tiene hoy una larga trayectoria literaria que no sólo se desarrolló en Argentina, sino también en los Estados Unidos, donde vivió varios años. Susan Sontag, luego de leer Cola de lagartija, deslumbrada por su escritura, comenzó a elogiarla públicamente, lo que devino en una profunda amistad entre ambas.
Ha escrito más de treinta libros entre novelas, cuentos y ensayos, ha sido traducida a más de veinte idiomas y sus textos se estudian en universidades de todo el mundo.
Puede decirse que lleva la literatura en su ADN ya que es hija de la escritora Luisa Mercedes Levinson. Jorge Luis Borges y otros escritores renombrados eran invitados frecuentes en su casa de infancia. Además de escritora excelente narradora oral, ha contado con gran sentido del humor muchas anécdotas referidas a su niñez y su adolescencia referidas a estos célebres visitantes.
Pese a su gran experiencia en el campo de la escritura según declaró oportunamente en este diario, desconoce el mecanismo que la produce «Hay una cosa que me obsede –dice– y es de dónde vienen los relatos. Creo hay algoritmos, por decirlo de alguna manera, sistemas de ordenamiento que te arman una historia”. Sin embargo, afirma conocer el mundo sólo cuando escribe.
Recibió numerosos premios y distinciones entre los que se cuentan el Premio Internacional Carlos Fuentes a la Creación Literaria en Idioma Español (2019) —“por su genialidad, constancia, sentido lúdico y creativo”—, el Premio León de Greiff (2017), el Gran Premio de Honor de la Sociedad Argentina de Escritores y Doctorados Honoris Causa otorgados por diversas universidades nacionales e internacionales.
Julio Cortázar dijo de ella caracterizando su escritura: «Valiente, sin autocensuras ni ultranzas, Luisa Valenzuela avanza a lo largo de varios libros que marcan un derrotero poco frecuente. Leerla es tocar de lleno nuestra realidad, allí donde el plural sobrepasa las limitaciones del pasado; leerla es participar en una búsqueda de identidad latinoamericana que contiene por adelantado su enriquecimiento».

Luisa Valenzuela: un merecido homenaje
Hoy tres editoriales le rinden homenaje y lanzan la Biblioteca con su nombre. Ellas son InterZona Marea y Factotum. “La iniciativa -dicen las editoriales- busca acercar su obra a nuevas generaciones y celebrar la vigencia de una escritora que ha expandido los límites del lenguaje, desafiando las convenciones literarias con libertad y audacia”.
Entre los libros de Valenzuela que integran la biblioteca figuran El Mañana, Carta de navegación, Cola de lagartija, El gato eficaz y Fiscal muere (interZona), ¿De dónde vienen las historias? (Factotum), y La mirada horizontal y Los tiempos detenidos. Encierro y escritura (Marea). “Son textos fundamentales que reflejan la diversidad, el riesgo formal y la potencia narrativa que han convertido a Valenzuela en una figura central de la literatura contemporánea” consideran las editoriales promotoras del homenaje.
Participarán del homenaje María Rosa Lojo, Esther Cross Elsa Drucaroff, Agustín Caride, Guillermo Piro, Carlos Aletto, Patricio Zunini, Daniela Pasik, Sonia Santoro, Lucía de Leone, Mabel Belluccii y Gabriela Mayer. Entrevistarán a Valenzuela Verónica Abdala y Ana Da Costa y presentarán Diego Indij y Constanza Brunet.
El homenaje se realizará en el Museo del Libro y de la Lengua, Av. General Las Heras 2555, hoy, 14 de noviembre, a las 18. Entrada libre y gratuita.