Las fotos de hospitales de distintos puntos del país mostraron pasillos vacíos donde suele haber largas filas. El segundo paro general contra la política económica del gobierno de Javier Milei se sintió con fuerza entre las y los trabajadores de la salud, que adhirieron en gran número al paro, mientras garantizaron guardias mínimas y atención de urgencias.

“Los hospitales de la Ciudad tienen 100% de adhesión. Solamente están trabajando las guardias mínimas y las urgencias. No hay consultorios externos, no hay cirugías programadas”, afirmó Héctor Ortiz, de la agrupación Hospitales de la Ciudad nucleados en ATE. “No se puede vivir con un sueldo de 450 mil pesos promedio. Preocupa este gobierno. Estamos cansados, agotados, con falta de personal, falta de recurso material, falta de insumos. Por eso la adhesión es importante”, remarcó.

Fuera de CABA hubo postales similares. “Muy buena adhesión en los hospitales de Córdoba”, confirmó Estela Giménez, secretaria adjunta de la Unión de Trabajadores de la Salud (UTS) en esa provincia, donde en noviembre pasado Milei obtuvo casi el 75% de los votos.

Pasillos vacíos

“Los 1600 hospitales y 6 mil unidades sanitarias del país amanecieron hoy con los pasillos vacíos. Solo se cubre la atención de emergencias e internados, respondiendo a la convocatoria de Fesprosa y otros gremios que nuclean a los trabajadores de la salud pública”, indicó la Federación Sindical de Profesionales de la Salud de la República Argentina.

“Esta es la respuesta del medio millón de trabajadores de la salud a la política del gobierno de eliminar derechos como la estabilidad, el salario digno, las asambleas en el lugar de trabajo o la huelga”, dijo María Fernanda Boriotti, presidenta de Fesprosa.

Y agregó: “Es una respuesta a la falta de insumos, al recorte de las prestaciones para los pacientes con necesidades especiales como los de la Dadse, que hoy están reclamando por su vida, amenazada por la falta de entrega de la medicación indispensable. Es la respuesta al recorte de los programas, entre ellos el de prevención del embarazo adolescente y, en general, a la política de precarización que lleva adelante el gobierno nacional”.

Apuntó también contra los “descuentos masivos de salarios a los cinco mil trabajadores del Hospital Posadas, a quienes además se los amenaza con incluirlos en las futuras listas de despedidos del Estado Nacional”.

Desde ese hospital, Laura Bogado – integrante de la Comisión Directiva Cicop por la minoría desde la Agrupación Marrón/PTS- resaltó que “a pesar de las amenaza de los directivos y el silencio de los gremios mayoritarios, la ausencia casi total de pacientes está haciendo sentir el paro nacional”.

“Milei: así no podemos seguir”

“Un día sin trabajadores ni pacientes en el Hospital Garrahan”, dijo la enfermera Bárbara Acevedo, quien compartió imágenes contrastando los pasillos y salas de espera colapsados de todos los días, con la casi nula circulación en el marco del paro.

En ese hospital pediátrico, la Asociación de Profesionales y Técnicos del Hospital Garrahan (APyT) convocó a una conferencia de prensa este miércoles para explicar los motivos de adhesión a la medida de fuerza.

“Todo el plan del presidente Javier Milei impacta sobre el Hospital Garrahan, porque crece la demanda por la situación social y por la desafectación de la medicina prepaga de muchas familias. En este contexto, en vez de darnos más recursos, han reducido las horas extras que puede hacer el personal. Esto en Enfermería afecta la dotación mínima necesaria para garantizar la calidad de atención, y por otro lado los salarios ya quedaron con la inflación totalmente desfasados. Milei: así no podemos seguir”, lanzó la secretaria general de la APyT, Norma Lezana.

“La situación del Hospital Garrahan es incierta, porque no está claro el panorama presupuestario. Por eso, vamos a presentar en la Legislatura porteña, a través de la diputada Celeste Fierro (MST-FIT Unidad) un Pedido de Informe sobre este tema particular”, anticipó.

“El Hospital Garrahan vive en la incertidumbre porque no se sabe nada del presupuesto para funcionar este año”, difundió la APyT sobre la situación del prestigioso hospital, que depende en un 80% del gobierno Nacional en un 20% del gobierno de la Ciudad.

En este marco Carlos Kambourian, ex presidente del Garrahan y ex candidato macrista, realizó una provocadora publicación: “Los paros también matan”, escribió en su cuenta de X. “Nuestro paro fue el de un bebé con convulsiones que se salvó gracias a que seguimos trabajando”, dijo. Recibió múltiples respuestas señalándole que las guardias y urgencias están activas. Y recordándole su pasado reciente: el año pasado la Cámara Federal porteña confirmó su procesamiento, acusado de usar fondos del hospital pediátrico para gastos personales.