Una fija en la cultura argentina en general y porteña en particular es hacer una parada en el bar de la esquina a desayunar o merendar el clásico combo de un café con dos medialunas. Los bares suelen colocar carteles en la vereda o en la ventana con la propuesta, el precio de venta o «la promo». Sin embargo, una pregunta en apariencia sencilla se torna difícil de responder: ¿Cuánto cuesta un café con dos medialunas?

El comunicador audiovisual Jeremías Madrazo (@madrazzzo) lanzó en Twitter la consigna y miles de tuiteros respondieron con el aporte de datos. «No entiendo el precio del café con dos medialunas, en todos lados sale distinto». Esa inquietud dio vida al «Índice Café con dos medialunas».

Debajo de ese tuit llovieron respuestas con precios de distintos lugares. «380 en Juancito, Banfield»; «FADU UBA Patio Central 450»; «880 en El Cóndor Villa del Parque»; «Terminal de Mar del Plata 530»; «en la facultad de artes de la UNLP son $ 150 si te sirve»; «Adorado (Nuñez), $500. Las Delicias (Florida, Vicente López), $450».

La información fue tanta que Jere y su novia Pilar (@PilarDibujito) decidieron ordenarla y convertirla en una infografía que se sigue completando.

«Con mi pareja, solemos sentarnos en bares a pedir siempre el café con medialunas y notamos que nos cobraban siempre distinto. Dos bares del mismo barrio, con infraestructura similar, tienen precios muy dispares. Se pueden conseguir muchos a $ 200; sobre todo, en facultades. Al parecer, el promedio está en $ 450, pero llegan a superar los $ 900», contó Jere a Tiempo, a partir del análisis de un millar de datos.

«Una cafetería lo puede vender a $ 300 y un kiosco, a $ 500. En muchas facultades, cuesta menos de $ 200 y algunos lugares ya lo venden a más de $ 900», dice la infografía de @PilarDibujito, diseñadora gráfica y profesora de la FADU.

Uno de los más económicos se puede conseguir en Ciudad Universitaria, a $ 150. El más caro, en Plaza Café, Caballito, a $ 910. Le sigue Pertutti, de Recoleta, a $ 900.

La distorsión de precios en el café

Los amplios márgenes de precios encuentran más explicación en una economía inflacionaria de precios distorsionados que en una mera cuestión de oferta y demanda.

El economista Martín Kalos explicó el fenómeno en diálogo con Tiempo: «Hay varias cuestiones que se solapan. La primera es el lugar; hay zonas de cercanía a lugares de trabajo o residenciales o de mayor poder adquisitivo que suelen tener una mayor demanda, pueden poner un precio mayor que lugares con menor densidad poblacional o de menor poder adquisitivo».

«La segunda cuestión, más relativa a la coyuntura de estos años, tiene que ver con la aceleración inflacionaria. Con una inflación mensual tan alta es muy difícil darse cuenta si lo que estás comprando es caro o barato. Esto pasa con cualquier producto. Uno no sabe si en la otra cuadra va a poder o no conseguir algo más barato. La dispersión de precios es mayor porque la cantidad de ajustes de precios es mayor en el tiempo y eso habilita a que un comercio lo ponga más caro que el de al lado. Cada quien va armando la estrategia de precios semana a semana o mes a mes. En ese marco, hay espacio para que haya precios muy distintos porque el consumidor no tiene la noción de un precio razonable», analizó.

Además, Kalos planteó que «existen distintos tipos de cafés y de medialunas; es decir, hay cuestiones de calidades y de costos».

Los autores del Índice Café con Madialunas aclaran: “Los datos de esta infografía fueron recopilados en Twitter y están cero chequeados”.