En su intento de controlar la inflación de cara a los comicios legislativos de este año, el gobierno nacional buscará en la semana que se inicia sellar sus primeros acuerdos de precios de proveedores de la industria.

Se trata de sectores clave para la formación de los precios que luego se pagan en las góndolas y el comercio minorista: fabricantes de insumos difundidos como plásticos, cartones, chapas, vidrios, entre muchos otros. En el grupo entran también los fabricantes de envases para los productos finales.

Las industrias alimenticias y de otros sectores del consumo masivo argumentan que los precios de esos productos explican en buena medida la dinámica inflacionaria de los últimos años; en particular el que dominó durante los meses que lleva la pandemia de Covid-19 (ver esta misma página).

La última medición de la inflación del Indec, del 4,8% en marzo, marcó un nivel que vuelve prácticamente imposible el horizonte de un índice anual ajustado al 29% como plantea el Presupuesto 2021.

Aunque los analistas proyectan una disminución paulatina de la inflación para lo que resta del año, la administración nacional intenta sumar señales periódicas destinadas al sector privado, que presiona por ver plasmadas las medidas que conforman su tradicional agenda, pero también a la población, que sufre en carne propia la depreciación continua de sus ingresos en plena carrera hacia las urnas.

La Secretaría de Industria del Ministerio de Desarrollo Productivo alista los primeros acuerdos para los próximos días. Según dijo su titular, Ariel Schale, a FM La Patriada, los sectores que primero firmarán serían química y petroquímica, aunque tanto la administración pública como las empresas del sector llevan el tema con máxima cautela: negocian índice por índice con avances y retrocesos todos los días.

Los minoristas, también

Mientras tanto, el gobierno sigue avanzando con nuevos formatos de acuerdo para los productos de consumo final.  El más reciente es el suscripto con los fabricantes de equipos electrónicos (ver página 19) y estuvo a punto de definir otro con la industria de consumo masivo que finalmente quedó en suspenso, aunque existen algunos avances. Por caso, y esto fue dicho tanto por las empresas como el oficialismo, reemplazará a Precios Máximos, que el gobierno lanzó cuando empezó la emergencia sanitaria y que las empresas cuestionan prácticamente desde ese mismo momento.

Una firma que negocia con el gobierno señaló a Tiempo que el gobierno convocó a diseñar una lista de 180 productos para congelar por seis meses y propuso que los productos del acuerdo tengan los precios impresos en sus envases. Cabe destacar que el programa actualmente vigente tiene una lista de más de 2000 precios de referencia. Las empresas propusieron una lista de 120 artículos tras lo cual no hubo más novedades.

Otra medida oficial relacionada fue la convocatoria a reunir al Observatorio de Precios y Disponibilidad de Insumos, Bienes y Servicios a través de la Resolución 397/2021 publicada en el Boletín Oficial el lunes. El mismo día se informó del nuevo registro de exportación de carne, que generó el rechazo de las patronales de la actividad rural. El jueves se anunció el troceo para la comercialización de la carne vacuna promocionado como una medida para aportar eficiencia a uno de los mercados de consumo masivo más importantes del país. Empezará a regir en enero de 2022 y contempla financiamiento para faenadores y frigoríficos. Y el viernes la tensión escaló cuando la Mesa de Enlace agropecuaria cuestionó declaraciones de la secretaria de Comercio Interior, Paula Español, que reconoció que el gobierno analiza subir las retenciones a las exportaciones primarias. «