Dexter (2006)

El técnico forense de la policía de Miami, Dexter Morgan, es el más simpático de los asesinos seriales. Es también, acaso, el primero que buscó la empatía con el espectador antes que su entendimiento. De ahí su popularidad, que fue ganada en base a adherentes antes que al morbo que produce y convoca de esta clase de asesinos que sobre cuyo “origen” tan bien se ocupa la recién finalizada Mindhunter. Dexter es un especialista en muestras de sangre que parece tener los mismos impulsos criminales de cualquier mortal; la diferencia que encuentra la forma para canalizarlos. Todo eso tiene el aderezo de que su hermana trabaja en la misma división de investigación que él. Sus ocho temporadas no resultaron parejas, pero tuvo un muy buen final y supo mantener alto el interés.

Hannibal (2013)

El asesino que gusta a públicos eruditos, a los que se fascinan con la sofisticación que puede alcanzar un humano en su saña con el prójimo. Eso más allá del alto sentido de la justicia que tenga, al por cierto cuestionado por su origen de clase: como le sucede a Batman, su sentido de justicia a veces adolece de las consideraciones materiales de existencia. Esta especie de precuela de El silencio de los inocentes tuvo tres aplaudidas temporadas, con un sentido del morbo exiquisito, si es que eso es posible.

Bates Motel (2013)

Es sabido que Norman Bates, el personaje de Psicosis, tenía algunos problemas. Esta serie se ocupa de contarlos. Antes que a modo de justificación -como habría sido esperable si se hubiera producido en el tiempo de su aparición cinematográfica-, a modo de explicación de algunos fenómenos que suelen escaparse al entendimiento no especializado. Tal vez por eso falta de “moral” es que la serie esté ambientada en la actualidad. Este año estrenó su quinta temporada, que empezó más que bien.

True Detective (2014)

Por supuesto que la primera temporada, que se puede ver sin continuación y a la manera de una miniserie. Su punto más interesante es que muestra cómo la pareja de detectives compuesta por Matthew McConaughey y Woody Harrelson se ve implicada en la resolución de un asesinato en serie que lleva a sus respectivas vidas a un lugar que jamás habrían imaginado. Mostrar como el lado B, mostrar cómo afecta a quienes participan en este tipo de investigación enfrentarse a lo cruel, es su mayor mérito. Hacerlo con la profundidad narrativa y reflexiva que expone, como el efecto deseado de esa aspiración principal.

Bron/Broen – The Bridge (2011)

Aquí nos referimos a la sueca y no a su versión norteamericana The Bridge. Y es porque en especial el extraordinario personaje -desde muchos puntos de vista- de Saga Norén es todo un hallazgo para la televisión y convierte a la serie en algo fuera de lo común. Además, porque hacerlo creíble es algo igual de difícil, y a la actriz sueca Sofia Helin el personaje nunca se le escapa de las manos. Rafael Pettersson con John, el policía danés, es un partenaire espectacular. Todo comienza cuando encuentran un cuerpo justo en el medio del puente que separa Suecia de Dinamarca; el problema es que el cuerpo está justo cortado a la mitad y puesto justo en la línea limítrofe de los países, y tiene un pequeño detalle: la parte del tronco pertenece a un cuerpo, y la de las extremidades inferiores, a otro. Tiene anunciada una cuarta temporada para el 2018