Las exportaciones de trigo de la campaña 2023/24, que se encuentra en proceso de siembra, podrían crecer 120% respecto de los embarques realizados durante el ciclo pasado y alcanzar las 9,5 millones de toneladas por un monto total de US$ 2.375 millones, casi US$ 1.000 millones más que en 2022, estimó este viernes la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR).

«Luego de una campaña 2022/23 en la que las exportaciones se resintieron fuertemente, y difícilmente puedan llegar a superar el rango de las 4 o 4,5 millones de toneladas hasta el final de la campaña comercial, puede esperarse una recuperación de cara a lo que será el ciclo comercial 2023/24», indicó la entidad bursátil en un trabajo.

De esta manera, desde la BCR proyectaron que se podrían despachar entre 4 y 4,5 millones de toneladas entre diciembre de este año y noviembre de 2024, lo que implicará un aumento del 120% con lo embarcado en este ciclo comercial, que se vio afectado por la sequía.

Si bien desde la BCR anticiparon que la concreción de esta previsión «dependerá de muchas cosas», entre ellas la competitividad del grano argentino y la necesidad de la molinería local, las malas perspectivas para la producción de Australia, nuestro principal competidor en el hemisferio Sur, «podrían permitir a nuestro país ganar participación en países usualmente atendidos por el gigante oceánico».

A valores internacionales de hoy, estos 9,5 millones de toneladas en exportaciones podrían representar un monto de US$ 2.375 millones de dólares, estimó el informe, que la consideró «una más que importante recuperación del aporte del complejo a la balanza comercial de nuestro país».

«De cumplirse, podríamos estar hablando de casi US$ 1.000 millones adicionales en exportaciones entre campañas, aunque aún US$ 2.300 millones de dólares por debajo de lo que dejó la 2021/22», marcó el trabajo.

La Bolsa rosarina subrayó que «es necesario aclarar que el impacto en liquidación de divisas y en recaudación por retenciones por estas exportaciones no será pleno».

Esto se debe a que las Declaraciones Juradas de Ventas al Exterior (DJVE) de la actual cosecha superan ampliamente el volumen que se espera exportar.

Así, se estima que el sector exportador podría pasar de campaña comercial (rollear) con unos 4,6 millones de toneladas de trigo ya declarada en ventas externas.

«Esto tiene especial impacto en las cuentas públicas, dado que sobre esas ventas los exportadores ya abonaron el 90% de los Derechos a la Exportación (DEX) correspondientes», por lo que descontado ese monto ya ingresado, el aporte en retenciones del sector exportador de trigo podría ubicarse en el orden de los US$ 160 millones a lo largo de la campaña.