A Patricia Primo le llegó una multa de 4700 pesos por exceso de velocidad en la Ruta 205, antes de llegar a Lobos. El detalle es que ocurrió un viernes a las 9 de la mañana. “Y yo ese día estaba en mi oficina, en Norberto de la Riestra. Jamás pasé por allí a ese día y a esa hora. Soy jubilada con discapacidad motriz, de ningún modo puedo pagarla”, relata a Tiempo. El de Patricia no es un caso aislado. Si bien ocurren desde hace unos años en todo el país, en el último tiempo se multiplicaron las denuncias de multas “truchas” en la Provincia, generando una gran caja recaudadora. Y la Defensoría del Pueblo bonaerense alertó por la proliferación de autos mellizos.

La mayoría se entera de las infracciones al momento de pedir un libre deuda porque quiere vender su vehículo, o al renovar la licencia de conducir. Es por esto que muchos, apremiados por el tiempo, resuelven pagarlas de todas formas. “Tenemos varios casos, es recurrente, por eso estamos evaluando un camino a seguir, más allá del hecho puntual de pedir la nulidad del acta de infracción. El mayor problema son los autos mellizos”, afirma Federico Stiz, director general de la Defensoría. “En el último Informe de Accidentología planteamos que el Estado debe dejar de ser un Estado sancionador y generar beneficios para el buen conductor, como exención de tasas o extensión de la licencia. Pero muchas veces los radares tienen más fines recaudatorios que precautorios”, se lamenta.

El 19 de febrero, a Romina Acevedo, de 35 años, se le cumplían los 90 días para poder renovar el registro, en Vicente López. Consultó en la web y le saltaron varias infracciones en Provincia. “Me llamaron la atención las fechas, porque en esos días el auto no había salido del Área Metropolitana. Una era del 11 de diciembre en Dolores, por 3838,50 pesos. Ese fin de semana estuve acá en el cumpleaños de mi sobrino. Tengo seis multas con fecha 8 de febrero por $ 11.446 en total, casi todas en Dolores, cuando ese fin de semana no viajé a ningún lado porque internaron a mi abuela. Y otra del 5 de enero por exceso de velocidad, también por $ 3838,50, también en Dolores. Ese día estuve en Bahía Blanca. Le pedí a la empresa del Telepass que me mandara un detalle de todos los peajes registrados del auto en los últimos meses, y en ningún momento figura que esos días pasamos por algún peaje”, remarca. 

Los casos también se multiplican en las redes. “Tengo un auto guardado y me saltaron cuatro multas, sin foto, del mismo día en La Plata y otra de enero en Dolores… Todo mentira. Lo más lindo es que el año que viene renuevo registro y todas suman como 20 lucas”, reclama Hernán Krysztopa. “A mí me llegaron de La Plata. Vivo en Necochea y lo más lejos que lo llevé fue a Mar del Plata”, comenta Luis Fraga.

Para Marcelo Gerez, abogado especialista en faltas de tránsito y derecho contravencional, “obviamente hay equivocaciones, pero creo en las fotomultas. Sirven para disuadir y evitar accidentes de tránsito, como en la Avenida Figueroa Alcorta. La gente siempre se siente estafada cuando paga una multa. Te salta una de 2015 y ni te acordás lo que hiciste ese día. Por eso creo que tendría que haber un plazo de caducidad de seis meses”. 

A diferencia del derecho penal, aquí se invierte la carga de la prueba: el conductor tiene que probar que no cometió la infracción. A los cinco años prescribe. Gerez explica lo que puede suceder al presentarse ante el magistrado: “El juez dirá: ‘No me pruebes que no estuviste ahí, probame que el auto no estuvo’. Es difícil, pero un ticket de estacionamiento o un pase por un peaje pueden servir de prueba”. En el 95% de los casos los conductores no apelan. La urgencia por “estar en regla” pesa más que los cuatro meses que suele tardar el proceso. En enero, el gobierno bonaerense aumentó los valores de las multas un 35%: el máximo se fue a 26.780 pesos. La Unidad Fija se actualiza de acuerdo a los aumentos de los combustibles. 

En los últimos cinco años, ciudadanos de todo el país recibieron multas «truchas» desde curiosos municipios, como Recreo (Catamarca), Pampa Blanca (Jujuy), y comunas en Entre Ríos, por miles de pesos. A inicios de 2013, más de dos mil personas del Interior recibieron infracciones del gobierno de la Ciudad. Ninguno había estado en el lugar del hecho, y muchos (como la mayoría de los 200 damnificados de Villa Diamante) ni siquiera conocían la Capital Federal.«

Qué datos debe contener un acta de infracción

En enero, la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV) distribuyó una guía para que los conductores sepan si reciben una infracción legal o se trata de una trampa. Al recibir una multa por un agente o al domicilio, se debe controlar que figuren: la fecha en que fue cometida la presunta infracción –día, hora, mes y año–; ruta y kilómetro del hecho; imagen del vehículo en el momento de la infracción con identificación del dominio (en caso de utilizarse un radar cinemómetro); velocidad máxima permitida y velocidad a la que circulaba, expresada en km/h; firma de la autoridad pública interviniente; datos del radar utilizado –marca, modelo o código de aprobación y número de serie–, incluido el número de disposición de la ANSV que autoriza su uso; matrícula habilitante del operador del radar; datos del municipio que la realiza; y contacto del Juzgado de Faltas o tribunal competente. Además, los conductores que se crean estafados pueden escribir a [email protected]