Temporada de verano significa también millones de personas transitando las rutas argentinas, con la inseguridad vial que puede significar, teniendo en cuenta cifras actuales que reveló el flamante informe del Observatorio Vial Anual: menos de la mitad de las y los conductores usa el cinturón de seguridad en autopistas. Y el 27% utiliza el celular mientras maneja, algo que incrementa cuatro veces el riesgo de choque.
El estudio elaborado por el Observatorio, integrado por Autopistas del Sol y Autopistas del Oeste, se centra en el Acceso Norte, Avenida General Paz y el Acceso Oeste. Y establece datos claves, por caso: al conducir un vehículo a 110 km/h, responder con “OK” o enviar un ícono equivale a recorrer 120 metros a ciegas, en cuatro segundos.
En Acceso Norte y ramales Pilar, Campana y Tigre y Avenida General Paz sólo el 47% de los conductores utiliza cinturón de seguridad, frente al 89% de quienes lo hacían un año antes, mientras que en Autopistas del Oeste lo hace apenas el 37%, mucho menos que el 70% de un año atrás.
«Esta falta de cumplimiento de las normas incide en las causas de los incidentes viales», sostienen. Por eso, lanzaron la nueva campaña anual de seguridad vial, bajo el nombre “Ponete en #ModoAuto, sin celular, con cinturón, con casco, sin alcohol”, para generar concientización vial.
Como parte de la iniciativa, colocaron más de 60 mensajes en ubicaciones estratégicas de las Autopistas en puentes, pasarelas peatonales, marquesinas de estaciones de peaje troncales y espacios al margen del trazado. Por esas trazas circula a diario un millón y medio de vehículos.
La campaña cuenta con el aporte técnico de CESVI (Centro de Experimentación y Seguridad Vial de Argentina) y es acompañada institucionalmente y difundida por ANSV (Agencia Nacional de Seguridad Vial, del Ministerio de Transporte de la Nación), CECAITRA (Cámara de Control y Administración de Infracciones de Tránsito) y APTTA (Asociación de Periodistas de Tránsito y Transporte de Argentina).
Desde el Observatorio Vial advierten que el creciente uso del celular al conducir un vehículo cuadruplica el riesgo de choque, tanto al hablar como al enviar mensajes. Y grafican las situaciones, teniendo en cuenta que ene tránsito cada segundo que no se presta atención es mayor peligro:
Al conducir un vehículo a 110 km/h, responder con “OK” o enviar un ícono equivale a recorrer 120 metros a ciegas, en cuatro segundos. Y responder “Estoy manejando, después hablamos” es igual a transitar 240 metros en ocho segundos también a ciegas.
«Cualquier factor, tanto interno como externo al vehículo, contribuye a su distracción. Por eso, el celular y cualquier otra tecnología deben mantenerse completamente fuera del alcance del conductor», acotan.
Además, disminuyó la utilización del cinturón de seguridad, no sólo de los acompañantes en asientos traseros, sino del conductor y del copiloto, lo que puede generar graves daños a los ocupantes del vehículo.
En el Acceso Norte y sus ramales y la Avenida General Paz, sólo un 47% de los conductores y 36% de los copilotos lo utilizan, frente al 89% y 78%, respectivamente, de un año atrás. En los pasajeros que viajan en asientos traseros es incluso menor: se lo abrocha apenas un 13% en los trazados de Autopistas del Sol y un 18% en los de Autopistas del Oeste.
Desde el Observatorio resaltan que utilizar el cinturón impide que los pasajeros salgan despedidos; reduce ocho veces el impacto dentro del habitáculo; ayuda al conductor a controlar mejor el vehículo, minimiza las lesiones y asegura la efectividad del airbag. Y recordaron que los niños y niñas de todas las edades deben usar cinturón de seguridad acorde a cada caso. Hasta los 12 años o los 36 kilogramos de peso, deberán suplementar su altura con el uso obligatorio de un búster. Los bebés deben ir en su sillita especial, fijada al cinturón de seguridad, ubicada en sentido opuesto al tránsito. Y las mujeres embarazadas deben ajustarse el cinturón de seguridad, pero sobre la cadera y no sobre el vientre.
Las mascotas también deben estar protegidas a través del cinturón de seguridad. Sus canastos o jaulas cerradas deben ajustarse y si van sueltos, deben ser atados a través de sus arneses.
Otras alarmas
Según datos de la ANSV, en la Ciudad de Buenos Aires –donde aún no existe Ley de Alcohol Cero al volante, sino el límite de 0,5 g/l (gramos de alcohol por litro de sangre)–, en cuatro de cada 10 siniestros fatales en autopistas hubo presencia de alcohol en sangre. Además, el 23,8% de los conductores que participaron en siniestros viales tenían alcohol en sangre; de ellos, el 83% tenía sólo de 0,01 a 0,5 g/l, dentro de los parámetros permitidos actualmente.
Desde el 1º de enero, la Ley de Alcohol Cero al conducir ya rige en la provincia de Buenos Aires y establece penas que incluyen desde multas y retención de la licencia hasta la inhabilitación para conducir y el arresto. La ley también se aplica en otras 11 provincias: Chaco, Chubut, Córdoba, Entre Ríos, Jujuy, La Rioja, Río Negro, Salta, Santa Cruz, Tierra del Fuego y Tucumán. Y desde la ANSV buscan que la ley esté vigente a nivel nacional, en todo el país.
Las estadísticas relevadas por el Observatorio destacan que en las autopistas de ambas concesiones crecieron los accidentes en moto en el último año: hubo un 60% más de siniestros en los trazados de Autopistas del Sol y un 20% más en los Autopistas del Oeste, con respecto a 2021. «Por ello, resulta clave concientizar a la sociedad sobre la obligatoriedad del uso del casco, tanto para el conductor de la moto como para sus acompañantes, ya que salva vidas al evitar o amortiguar golpes y heridas devastadoras y discapacitantes que podrían producirse en la cabeza», remarcan.
El casco es vital como sistema de protección: quienes no lo utilizan, corren un altísimo riesgo de muerte o de lesiones permanentes. Quienes lo usan ven disminuido este riesgo en más de un 73%.
