Tras más de una década de pensarlo, y mucho lobby empresarial, finalmente Europa se decidió y lo aprobó: los cargadores de celulares serán unificados. A partir de fines del 2024 habrá un cargador único, con puerto USB-C, para teléfonos inteligentes, tablets, cámaras y dispositivos portátiles.

La decisión fue aprobada por el Parlamento Europeo por amplia mayoría: 602 votos a favor y solo 13 en contra. La norma afecta sobre todo a empresas como Apple que tiene puertos específicos para la carga de sus modelos iPhone.

En Europa sostienen que la medida apunta a lo ambiental y lo económico: con un cargador único se evitaría el costo para consumidores y la cantidad de cargadores obsoletos que se tiran por año. El ahorro que estiman supera los 250 millones de euros por año, además de evitar casi mil toneladas de desechos electrónicos anuales en el continente.

Solo en 2020 se vendieron en el Viejo Continente unos 420 millones de teléfonos móviles y otros aparatos electrónicos portables. Cada ciudadano europeo posee tres cargadores para sus dispositivos, de los que solo usa dos de forma habitual. Y el 38% reportó en el pasado dificultades para cargar sus móviles, en general porque el cargador era incompatible, según cifras mencionadas en el tratamiento de la ley.

“La plétora de cargadores actuales será pronto cosa del pasado. Va a beneficiar a consumidores, a empresas y, también, al medio ambiente”, subrayó, Alex Agius, diputado del Parlamento.

A partir de la primavera europea de 2026 la medida será obligatoria en las computadoras portátiles. La flamante ley establece que «todos los nuevos teléfonos móviles, tablets, cámaras digitales, auriculares y cascos, consolas de videojuegos portátiles y altavoces portátiles, lectores electrónicos, teclados, ratones, sistemas de navegación portátiles, auriculares y portátiles recargables a través de un cable, que funcionan con un suministro de energía de hasta 100 vatios, deberán estar equipado con un puerto USB tipo C».

Los distintos países de la Unión Europea tienen ahora 12 meses para transponer a las leyes nacionales esta medida y otros 12 meses adicionales para que entre en vigor. Puede llegar a ser posible que en este proceso, algunos países quieran añadir obligaciones adicionales.

Apple siempre se mostró reticente ante esta ley, explicando que reduce la innovación y podría aumentar los desechos electrónicos. Según un informe de la Comisión Europea de 2019, el 21% de los dispositivos vendidos en Europa tenían un conector Lightning. Apple habitualmente presenta los nuevos iPhone en septiembre, por lo que el iPhone 16 sería el último sin USB-C.

La siguiente batalla será la carga inalámbrica. El objetivo de Europa es tener los requisitos establecidos para finales de 2024, y que su puesta en marcha ocurra varios años más tarde. Será el siguiente proceso para normalizar algo tan básico e importante para al vida cotidiana como la manera de cargar nuestros dispositivos.