Parecía que los incendios en el Delta del Paraná –que desde 2020 ya destruyeron casi un millón de las 2,3 millones de hectáreas que posee ese enorme humedal– habían sido un punto de inflexión, y que finalmente iba a tratarse la Ley de Humedales, tras años de intentos fallidos. Pero nuevamente fue postergada, ante la presión de los gobernadores (especialmente los del norte, relacionados al desarrollo del litio), sectores productivos, empresariales y mineros.

Durante la semana los presidentes de los bloques mayoritarios Germán Martínez (FdT), Mario Negri (UCR), Cristian Ritondo (PRO), Juan Manuel López (Evolución Radical), Luis Di Giacomo (Provincias Unidas) y Margarita Stolbizer (Encuentro Federal) presentaron una nota a la titular de la Cámara de Diputados, Cecilia Moreau, solicitándole que «se fije una nueva fecha» para la continuidad del debate, «con el objeto de escuchar las posiciones de los gobiernos provinciales», que solicitaron «ser escuchados» en el debate.

La decisión de suspender el plenario de comisiones de Recursos Naturales, Agricultura y Presupuesto, previsto para el jueves, en la que el oficialismo quería firmar un dictamen en mayoría, despertó el reclamo de otros diputados y de las organizaciones sociales y ambientales. «Es vergonzoso, estos son los lobbies que vienen presionando desde hace más de diez años para que la ley no salga, con falacias y falsos estudios», planteó Ivo Peruggino, de la Multisectorial Humedales. «Rechazamos esta acción dilatoria e ilegítima de quienes lideran los bloques parlamentarios, es una decepción que aún no adviertan la crisis ecológica y climática que atraviesan los humedales, que están siendo degradados y destruidos cada día –remarcó Ana Di Pangracio, de la Fundación Argentina de Recursos Naturales (FARN)–. Los incendios son solo una de la gran diversidad de afectaciones que tienen a diario los humedales, que cubren un 21,5% del territorio nacional».

El interbloque Federal del socialismo santafesino fue uno de los más críticos. Su región es la que sufre las mayores consecuencias de los incendios y el humo que ya afecta a casi dos millones de personas en esa provincia. En diálogo con Tiempo, la diputada Mónica Fein, advirtió: «la peor respuesta de esta Cámara a la sociedad fue la irregular suspensión del plenario de comisiones solicitada por los espacios mayoritarios». 

La diputada Mónica Fein.

–¿Por qué es importante la ley? 

–La Ley de Humedales es necesaria porque obliga a las provincias, coordinado por el Ministerio de Ambiente, a hacer un inventario y a desarrollar un plan de desarrollo territorial. Eso significa proteger aquellos territorios que permiten evitar el cambio climático, inundaciones, sequías, que protege nuestro aire y que ayuda a mantener el equilibrio del planeta. Los presidentes de bloque no pueden suspender el emplazamiento que se votó en el recinto para que un grupo de comisiones se reúna a tratar un tema. Fue una forma intempestiva que significa negar una realidad que se viene discutiendo en el Congreso desde hace diez años.

–¿La norma realmente puede afectar la actividad económica?

–Justamente es importante decir que la Ley de Humedales no se opone a un desarrollo económico, sino que plantea un desarrollo equilibrado para que la naturaleza y los seres humanos puedan vivir en equilibrio. Ese es el objetivo y por eso esperamos cuanto antes que sea ley. «