Un grupo de fanáticos vandalizó el frente de la casa de un hombre de 74 años en Floresta. Al parecer, el hombre, llamado Omar Assad, fue denunciado porque a través de un cartel que montó en su casa se solidarizaba con el pueblo palestino, manifestándose en contra de la guerra. En un inusitado despliegue policial, se apersonaron agentes de la Policía de la Ciudad en varios móviles y le secuestraron el cartel. Poco después, la puerta de la vivienda recibió un baldazo de pintura blanca. 

En un comunicado firmado por la «Familia Assad, vecinas y vecinos del barrio», repudiaron «los actos vandálicos y de persecución contra quienes se solidarizan con Palestina»; y contaron que todo sucedió en la mañana de este jueves en Cuenca al 900, donde vive el hombre junto a su familia.

«El vecino ostentaba en su balcón un cartel en solidaridad con el pueblo de Palestina en el contexto del plan sistemático de limpieza étnica (genocidio) que el Estado de Israel está llevando a cabo en la Franja de Gaza. Según los uniformados, ese cartel constituiría un acto de discriminación penado por la ley 23.592, de reciente vigencia”, describe el comunicado. 

Tiempo dialogó con el abogado Ismael Jalil, quien junto a su colega María del Carmen Verdú, representan a Omar y por estas horas están avanzando en la formulación de una “denuncia por el ataque”.

Según pudo reconstruir este diario, el cartel pedía “que se vayan de Palestina los sionistas, están dejando a Hitler chiquito”, haciendo alusión a lo que estaría generando en la población civil, los ataques de Israel en la Franja de Gaza.

«Notificaron al señor Assad de su imputación y se retiraron sin dar explicaciones (por ejemplo cómo, quién y de qué forma se instruyó el sumario)», añade el comunicado que advierte que a las pocas horas la puerta de la casa fue vandalizada. 

No son desconocidos quienes cometieron esta intimidación. Las actuaciones estaban sólo en poder de la misma Policía de la Ciudad y la fiscalía interviniente”, sigue, al tiempo que analiza: “El señor Assad pertenece a la comunidad islámica de Flores, recurrentemente atacada por la indudable islamofobia y estigmatización que el propio Estado se ha encargado de promover por su doble condición de musulmanes descendientes de árabes y denunciantes de las diversas masacres que el Estado de Israel acomete contra población civil indefensa de Palestina”. 

Por último, exigen “la inmediata instrucción de las medidas tendientes a esclarecer el hecho, el castigo a los culpables y por sobre todas las cosas, llamamos a frenar esta ola de amedrentamiento contra quienes ejercemos el derecho a manifestarnos contra las violaciones de los DDHH promovidas desde el Estado de Israel, avaladas por inequívocos gestos de autoridades y referentes nacionales de diversas corrientes políticas”.