El gobierno porteño decidió no darles respuestas a las y los estudiantes de la Escuela Técnica N°9 Luis Huergo, del barrio de Caballito que, desde el martes pasado, no tienen clases por la presencia de ratas dentro del edificio. La situación se profundizó cuando el lunes de esta semana un estudiante de cuarto año fue mordido por un roedor en la mano durante el recreo. Esa misma tarde, una vez que terminaron las clases, el conjunto de estudiantes salió a manifestarse y realizó un corte de calles en la intersección de la Av. Gaona y Av San Martín, a pocos metros del monumento al Cid Campeador.

Tras una asamblea decidieron no ingresar a la escuela hasta que el ministerio de Educación porteño, al mando de Soledad Acuña, realice una desratización profunda de todo el edificio para eliminar a la plaga de roedores y garantizarles condiciones sanitarias dignas a estudiantes y docentes. La desratización nunca llegó y la protesta se profundiza día a día. En paralelo denuncian que la situación se descontroló porque las ratas caminan entre las viandas que almuerzan los estudiantes. Este viernes se cumple el cuarto día consecutivo sin clases por la presencia de roedores.

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Protestas de estudiantes

Sin ofrecerles ninguna solución, el movimiento estudiantil que asiste a la Escuela Ingeniero Luis Huergo se siente abandonado por la administración porteña. En las últimas horas se reunieron con la dirección de Escuelas Técnicas del ministerio y la supervisión escolar del mismo sector.

Del encuentro tendría que haber participado Infraestructura Escolar, pero minutos antes de la reunión decidió no concurrir, y desde ese sector manifestaron que no iban a dialogar con los alumnos ni presidentes de centros de estudiantes, familias o docentes, y que solo mantienen abierto los canales de diálogo con las autoridades del colegio.

“No querer dialogar con nosotros es una actitud que tomaron desde hace mucho tiempo. Es una forma de negar los reclamos que hacen las estudiantes, docentes y familias e insistir querer comunicarse por un canal que es totalmente fallido, incompleto y erróneo”, señala a Tiempo León Arriola, presidente del centro de estudiantes de la Escuela N° 9 Luis Huergo.

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Estudiantes de la Huergo cortando Av Gaona y San Martín.

Pasaron 96 horas desde que los estudiantes decidieron no ingresar a la escuela en tanto Soledad Acuña no realice una desratización profunda en el establecimiento. Mientras tanto, el reclamo se profundiza al igual que las medidas de fuerza. Este viernes el movimiento estudiantil realizó otra sentada en las puertas de la escuela durante la mañana, a la tarde dejarán vacío el edificio mediante la realización de un faltazo y a eso de las 19 cortarán una vez más la Av. Gaona y San Martín para visibilizar el conflicto.

La situación se descontroló en cuanto a la invasión de ratas. Los estudiantes denuncian que los roedores caminan entre las viandas que ellos almuerzan en la escuela. “La primera presencia que se dio de las ratas es en la sala de preceptoría donde se guardan las 350 viandas que llegan todos los días. Es un tema que nos preocupa y nos alerta mucho, porque que aparezca un roedor en ese lugar con los alimentos que ingerimos a diario, es algo que se debería haber atendido con urgencia y no se hizo”, agrega Arriola.

Las ratas moribundas en el patio

Los únicos métodos que utiliza el ministerio de Educación porteño para desratizar escuelas de grandes dimensiones, son la colocación de cebos con veneno para la eliminación de plagas, y la instalación de cartones con pegamento en aulas, comedores y pasillos de las escuelas. La mayoría de las ratas escapan a las tramperas y las cajas con pegamento, algunas comen el cebo, pero la gran mayoría, que sigue alimentándose de la basura, deambula por los diferentes rincones del edificio escolar.

Un video tomado en el interior de la escuela muestra que las ratas muertas, o moribundas, no son recogidas por la empresa de mantenimiento que debería realizar una inspección diaria y permanente en el lugar. Como muestra el video publicado en el Instagram de la comunidad educativa de la escuela de Caballito, un ave lleva a un roedor que camina por el patio.