La autopsia realizada del cuerpo de la joven de 16 años que fue hallado en la reserva natural Santa Catalina, en Lomas de Zamora reveló que no había sido enterrada viva.

«La muerte se pudo haber producido por asfixia, es decir que cuando la enterraron tenía pérdida de conocimiento, pero no que había fallecido antes», confirmó de la Rosa y agregó «recibió algunos golpes y perdió la conciencia».

Además precisó, que el estudio forense hace referencias a lesiones, a «un estado de inconsciencia en el momento en el que fue enterrada» y que tenía «tierra en la boca». «Se puede inferir entonces que murió enterrada, es decir que tenía conocimiento en ese momento», determinó.

Bazán fue indagado el lunes por la jueza de la causa. En su declaración,  aseguró que el domingo, antes de la aparición del cuerpo vio caminar cerca de su casa a un «hombre encapuchado».

Presentó también un mapa de la Reserva Santa Catalina y explicó que es una zona de fácil acceso, que cualquiera puede ingresar y señaló que su casa «no tiene candado en la puerta».

Con respecto a Marcos Esteban Bazán, el único detenido por el crimen de Anahí Benítez, su abogado Lucio De la Rosa, dijo que están esperando la prueba para acreditar la inocencia de su cliente. “Mi cliente se puso a disposición de la Justicia y permitió que se le extraiga sangre a los efectos de cualquier cotejo de ADN que se quiera hacer en el marco de la investigación”.

Además, el abogado contó que el acusado entregó la clave de su celular que fue incautado durante el allanamiento para que se analicen los mensajes de texto, whatsapp y llamadas.

De la Rosa confirmó que durante la indagatoria de ayer ante las fiscales de la causa, Verónica Pérez y Fabiola Juanatey, su cliente hizo mención a que “uno o dos días después de la desaparición de Anahí”, radicó en la comisaría de Parque Barón una denuncia sobre “un hecho raro que le llamó la atención”.

Al dar una explicación de por qué los perros siguieron el rastro de Anahí hasta la casa de Bazán, De la Rosa sugirió que cualquier persona pude tener acceso al domicilio cuando no hay nadie.

El viernes 4 de agosto al mediodía, el cadáver de la adolescente fue encontrado desnudo, con lesiones cortantes y contusas en el rostro y la cabeza, enterrado en la Reserva Natural Santa Catalina, un predio de 730 hectáreas ubicado en dicha localidad y que la Policía rastrillaba con perros adiestrados, ya que esa zona fue donde se activó la antena de su celular el día que fue vista viva por última vez.