La Asamblea General de Naciones Unidas celebrará este martes una reunión especial referida a los bombardeos israelíes en gaza después del veto estadounidense a una resolución del Consejo de Seguridad que pedía un «cese el fuego humanitario».

La reunión fue reclamada por los representantes de la organización de la cooperación islámica y del grupo árabe, precisaron fuentes del organismo multilateral.

Las resoluciones de la Asamblea General no son vinculantes, pero podrían volcarse en un pronunciamiento escrito que terminaría teniendo cierta presencia en el conflicto, añadieron las fuentes.

El proyecto de texto, al que tuvo acceso la agencia de noticias AFP anoche, retoma en gran parte la resolución que fue vetada el viernes por Estados Unidos en el Consejo de Seguridad.

La nota, que señala una «situación humanitaria catastrófica en la Franja de Gaza», «exige un cese el fuego humanitario inmediato».

También plantea la necesidad del acceso humanitario y la protección de los civiles, y la liberación «inmediata e incondicional» de todos los rehenes.

A fines de octubre, luego de cuatro fracasos en 10 días por parte del Consejo de Seguridad, la Asamblea General -con una amplia mayoría de 120 votos a favor, 14 en contra y 45 abstenciones- pidió una «tregua humanitaria inmediata, durable y sostenida, que lleve al cese de hostilidades» entre Israel y Hamas.

Dos semanas más tarde, el Consejo de Seguridad logró adoptar una resolución que apelaba a «pausas y corredores humanitarios» en la Franja de Gaza, pero no a un «cese del fuego» ni tampoco a una «tregua».

La semana pasada, invocando por primera vez el artículo 99 de la carta de Naciones Unidas que permite al Secretario General llamar la atención del Consejo sobre un caso que «podría poner en peligro el mantenimiento de la paz y de la seguridad internacionales», António Guterres exhortó al Consejo a presionar por un «cese del fuego humanitario» al denunciar el «castigo colectivo» infligido a los palestinos.

«Desafortunadamente, el Consejo no lo logró», deploró Guterres ayer, al describir un Consejo cuya «autoridad y credibilidad se vieron gravemente comprometidas».

Al menos 17.700 personas, en su mayoría mujeres y niños, murieron en los bombardeos y operaciones terrestres israelíes en Gaza desde el inicio de la guerra, luego del ataque múltiple perpetrado por Hamas en territorio israelí el 7 de octubre pasado.

Israel lanzó ese día una ofensiva en respuesta a un ataque de milicianos islamistas procedentes de Gaza, que mataron a 1.200 personas, en su mayoría civiles, y secuestraron a unas 240 en el sur del país, entre ellos una veintena con nacionalidad argentina.

Un total de 101 soldados israelíes han muerto desde el inicio de la ofensiva terrestre en curso en la Franja de Gaza, dijo este lunes el Ejército israelí.

La ofensiva, que desde el 27 de octubre incluye operaciones terrestres, redujo a escombros gran parte del enclave palestino, de 362 kilómetros cuadrados y cerca de 2,4 millones de habitantes.