La Autoridad Palestina anuló un acuerdo con Israel para recibir un millón de dosis de vacunas contra el coronavirus argumentando que esos fármacos están «a punto de caducar». Esta medida se conoce en el marco de los nuevos choques en Gaza luego de manifestaciones de israelíes ultranacionalistas en Jerusalén Este que provocaron airadas protestas de la población local, a dos días de la asunción del nuevo goboerno, de Naftalí Bennet.

«Tras examen por parte de los equipos técnicos del Ministerio de Salud del primer lote de vacunas Pfizer recibido desde Israel (…) hemos descubierto que no era conforme con las características del acuerdo», declaró el portavoz del gobierno palestino, Ibrahim Melhem, en rueda de prensa. «El gobierno rechaza recibir vacunas a punto de caducar», añadió Melhem y precisó que unas 90.000 dosis fueron recibidas.

El domingo terminó el mandato de Benjamín Netanyahu tras 12 años en el poder. Pero antes de haberse tenido que ir, autorizó la Marcha de las Banderas, que se realizó el martes pasado. Como era de prever, las consignas antiárabes resultaron ofensivas para los pobladores. Poco más tarde, el ministerio de Defensa informó nuevos ataques con aviones sobre posiciones de Hamás en Gaza en respuesta al lanzamiento de globos incendiarios desde esa región hacia territorio israelí.

Esto complica el trabajoso acuerdo para el cese el fuego del 21 de mayo tras diez días de ofensiva israelí por el lanzamiento de 4000 cohetes. Esa vez, Hamás había encarado una respuesta militar a anteriores marchas, al desalojo de árabes en el barrio Sheij Jarrah, de Jerusalén y a represión policial en la Explanada de las Mezquitas (Haram al-Sharif) en la celebración del fin del mes de Ramadan.

Aquellos cruces fueron interpretados como una operación de Netanyahu ante el seguro desplazamiento del cargo luego de acuerdos de un frente opositor que incluye a extrema derecha de Bennet, al centro de Yair Lapid, a la izquierda y a partidos árabes israelíes.

Este viernes, diez palestinos fueron detenidos por la policía israelí en la Explanada de las Mezquitas, en incidentes que también causaron nueve heridos, según los equipos de emergencia. Unos 1.000 palestinos se congregaron tras las oraciones del viernes en el que representa el tercer lugar santo del islam y también sitio más sagrado del judaísmo. Algunos de ellos enarbolaban banderas palestinas y gritaban «Alá es grande», constató un periodista de la AFP.