Un tribunal de Estados Unidos condenó este jueves a uno de los líderes del grupo de extrema derecha Proud Boys a 17 años de cárcel por su participación en el asalto al Capitolio, sede del Congreso, el 6 de enero de 2021.

El condenado es Joseph Biggs, un veterano de Irak y Afganistán que llevó a unos 200 miembros de Proud Boys al Capitolio para intentar anular por la fuerza la declaración de victoria del demócrata Joe Biden sobre el presidente republicano saliente, Donald Trump.

Los fiscales habían pedido 33 años de prisión por actos de terrorismo, sin embargo, el juez Timothy Kelly subrayó que había fijado la pena en 16 años menos que las solicitadas, alegando que el acusado «no tenía intención de matar gente», consignó la agencia de noticias AFP.

El ataque del 6 de enero de 2021 «rompió nuestra tradición de transferencia pacífica del poder, una de las cosas más preciadas que teníamos como estadounidenses», dijo el juez.

Joseph Biggs pasó más de dos años en prisión preventiva, y en ese lapso estuvo en régimen de aislamiento, 22 horas del día sin salir de su celda.

En ese entonces había expresado su arrepentimiento, al asegurar que ahora estaba apartado de la política y de toda militancia.

En mayo, Biggs fue declarado culpable de seis cargos, incluido el de sedición, junto con otros líderes de Proud Boys.

«Sé que actué mal ese día, pero no soy un terrorista», aseguró a Biggs, de pelo y barba grises, vestido con un uniforme carcelario naranja que deja ver tatuajes en sus antebrazos.

«Creo que entendió el mensaje», alegó su abogado, Norman Pattis.

Al menos cinco personas murieron al margen del asalto al Capitolio y 140 policías resultaron heridos.

Más de 1.100 personas han sido arrestadas y acusadas por la asonada. Más de la mitad han recibido sentencias, en su mayoría a penas de prisión.

Las sentencias llegan mientras los tribunales estadounidenses intentan resolver las acusaciones contra Trump por los presuntos delitos cometidos por el expresidente relacionados con los disturbios del 6 de enero.