Mientras el proceso judicial que intenta sacar a Luiz Inácio Lula da Silva de la pelea para los comicios de octubre ya logró el objetivo de mantenerlo detenido, organizaciones sindicales de América Latina y Europa, parlamentarios y representantes de los derechos humanos a nivel internacional organizan diferentes actividades en diferentes puntos del planeta para reclamar por su liberación. En ese marco, Tiempo dialogó con el secretario general de SUTEBA Roberto Baradel, que en su calidad de secretario de Relaciones Internacionales de la CTA de los Trabajadores se encuentra en Bélgica, participando de las denominadas «Jornadas de Diálogo y Acuerdo de Libre Comercio Unión Europea-Mercosur», organizadas por la Friedrich Ebert Stiftung (FES) en Bruselas del 8 al 13 de abril.

En ese sentido, el también secretario general del SUTEBA anunció a este medio que este miércoles a las 12:30 (hora Bruselas, 7:30 hora argentina) la delegación latinoamericana presente, junto a organizaciones sindicales europeas y eurodiputados socialistas y de la izquierda, se presentarán en las inmediaciones del Parlamento Europeo para “rechazar la prisión, persecución política, mediática y judicial contra el ex Presidente y líder del Partido de los Trabajadores, Luiz Inácio Lula Da Silva”. Ese mismo día, además, se realizarán manifestaciones en las embajadas de Brasil en distintos países, entre ellos Bélgica (Bruselas), Uruguay (Montevideo) y Argentina (Buenos Aires).

En la delegación latinoamericana, también están presentes Jorge Taiana, diputado del Parlasur; Fernando Gambera, Secretario de Internacional del PIT- CNT (Uruguay) y Secretario General de CCSCS; Lilian Galán, Parlamentaria del Mercosur y Legisladora del Frente Amplio (Uruguay); Antonio Lisboa, Secretario Internacional de la CUT (Brasil); y Arlindo Chinaglia, Vicepresidente del Parlasur (Brasil).

Por otra parte, también este medio pudo saber que representantes de centrales sindicales de todo el continente americano están preparando una manifestación en Curitiba con fecha a definir para expresar la solidaridad con Lula y reclamar su liberación.

La del miércoles frente al Parlamento Europeo en Bruselas, “será una protesta planteando dos cuestiones: primero, inmediata libertad de Luiz Inácio Lula Da Silva, porque es una persona que está condenada y apresada sin pruebas, violando todas las garantías que tiene que tener un estado democrático. Vamos repudiar esa acción, y además reclamaremos las suspensión de la firma del tratado (de libre comercio entre el Mercosur y la Unión Europea) y pediremos que se suspenda”, anticipó Baradel a Tiempo.

“El análisis es que está en riesgo la democracia de todo el continente. Si esto se consolida en Brasil, son recetas que se van a aplicar y, en realidad, ya se están aplicando con otra intensidad tanto en Argentina, Ecuador y otros países de Latinoamérica, con una justicia que no es justicia, que depende de las corporaciones, ni siquiera de los gobiernos. Una justicia que junto con los monopolios mediáticos y, lamentablemente en el caso del Brasil, con el nuevo factor que apareció: las fuerzas armadas, el Ejército amenazando con un golpe de Estado directo. Ya hubo un golpe en Brasil, un golpe blando, golpe institucional donde derrocaron a la presidenta Dilma Roussef sin ninguna prueba, y hoy está un usurpador, Michel Temer”, planteó Baradel.

“Con esa amenaza, obviamente no hay democracia y esto pone en riesgo la democracia de toda la región. Por eso, lo que han hecho con Lula es impedirle al pueblo brasileño, ante la crisis que está sufriendo, tener una salida a través del voto popular. Ellos quieren manipular y poner a los candidatos que les van a responder, para garantizar sus tasas de ganancias. Hay que denunciarlo y por eso es importante que en este foro internacional alcemos la voz los parlamentario y aquellos que representamos a los trabajadores”, remarcó Baradel.

También el secretario de Relaciones Internacionales de la CTA de los Trabajadores anticipó que se suman a la iniciativa del Premio Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel, “de solicitar la entrega del Nobel de la Paz para Luiz Inácio Lula Da Silva, por el sólo hecho de sacar a 50 millones de brasileños de la pobreza. Creo que por eso hoy está apresado y condenado sin pruebas. Es el peor delito que pudo haber cometido para las clases dominantes y las corporaciones: la distribución de la riqueza y que muchos ciudadanos hayan salido de la pobreza”, concluyó.