El senador Fernando «Pino» Solanas fue invitado por la Academia Pontificia de Ciencias del Vaticano para participar de la segunda reunión «Ética en Acción para el Desarrollo Sostenible e Integral de la Paz», dirigida a promover el desarrollo humano integral y sostenible, en respuesta a la Encíclica Laudato Si’.

«En Argentina el discurso del Papa se usa mucho. Pero en los medios no está tan presente, y cuando está es para pegarle. Desde Verbitsky hasta los principales programas de televisión, cuando está la figura del Papa no es para elogiarlo», criticó el senador en diálogo con Télam y otros medios en el Vaticano al terminar su participación en el seminario.

«Y la figura de Francisco hay que levantarla. En un mundo que está en una grave crisis política, con nueve países que tienen capacidad nuclear, y una guerra nuclear que podría ser el fin. Hoy el Papa es una autoridad mundial respetada, hay que escucharlo y hacerle caso», agregó el senador, quien en octubre pasado tuvo un encuentro privado de casi una hora con el Pontífice en la residencia de Santa Marta.

«Es extraordinario tener una figura como Francisco que tiende a la unidad nacional», sostuvo Solanas.

Consultado sobre su posible participación electoral este año en la Ciudad de Buenos Aires, el director de cine y ex diputado aseguró: «No pienso renunciar a la banca de Senador. Yo no soy candidato pero eso no quiere decir que no tenga una opinión política».

«Si bien los tiempos electorales están todavía verdes, la convocatoria que sí hago es a un frente plural, pero en el que no tendrán lugar los que en los últimos años han cometido barbaridades en el gobierno», aseveró.

En ese marco, planteó que «es una contradicción absoluta decirse progresista y quedarse con fondos públicos. Eso debe ser repudiado», planteó antes de reconocer «actitudes interesantes, de un gobierno respetable» en la administración bonaerense de María Eugenia Vidal, pese a considerarse «opositor» a Cambiemos a nivel nacional.

El encuentro reunió a empresarios, profesionales, profesores y líderes de distintas comunidades religiosas, entre ellos la reverenda de Japón Kosho Niwano; el ayatollah Mostafá Mohghegh Damad; el cardenal ghanés Peter Turkson, prefecto del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral de la Santa Sede y el jurista español Federico Mayor Zaragoza para «avanzar en acciones concretas en respuesta a las preocupaciones universales como la dignidad humana, la justicia social, el bien común y el bienestar compartido».