A partir de una investigación del juzgado federal de Daniel Rafecas, se logró identificar la casa donde funcionó un centro clandestino de detención y tortura vinculado al grupo de tareas de la SIDE que operaba en “Automotores Orletti”. Este inmueble, ubicado en las calles Pomar y Chiclana, en el barrio porteño de Nueva Pompeya, era una base operativa de la patota que encabezada el represor Aníbal Gordon.

La casa de Pomar y Chiclana tenía un galpón y un local ubicados en la planta baja del inmueble. Funcionó como centro clandestino al menos entre mayo y junio de 1977 y se sabe que estuvieron cautivas allí al menos 7 personas. Fue parte del circuito represivo de la SIDE que comenzó a funcionar con la casa de la calle Bacacay, activa entre marzo y mayo de 1976, y con Automotores Orletti, entre mayo y noviembre de ese año. Bacacay, que fue identificada en 2020, y Orletti estaban en la misma manzana del barrio de Floresta, mientras que Pomar estaba a unos 7 kilómetros al sur, a pocas cuadras del límite con provincia de Buenos Aires.  

El pasado 6 de diciembre, el juez Rafecas dictó una orden de no innovar sobre el edificio, que está vacío desde hace algunos años, con el objetivo de poder preservarlo como prueba judicial, poder hacer un registro del lugar y una inspección ocular.

La investigación de este nuevo centro clandestino de detención comenzó a partir de un sumario militar iniciado en 1977 a la banda que encabezaba Aníbal Gordon por el secuestro extorsivo a Pedro León Zavalía, un agente de bolsa y dueño de la financiera Río Paraná.

Zavalía, a quien Gordon le atribuía vínculos con las empresas de la familia Gravier, fue secuestrado el 16 de junio de 1977 y llevado a esa casa que el grupo de tareas alquilaba como base de operaciones. Después, fue trasladado a la provincia de Córdoba en un intento por cobrar un rescate millonario y fue liberado alrededor del 22 de julio de ese año.

En el sumario, ex miembros de la SIDE reconocen el funcionamiento de una base operativa en esa casa y que Zavalía fue llevado allí. Señalan que prestaban servicio unas 15 personas bajo la dirección de Gordon, quien se hacía llamar también por el apellido Silva.  

En el sumario de la justicia militar figuran dos datos que permitieron avanzar en la identificación del lugar. Por un lado, el teléfono de la base, que pudo vincularse con la casa de la calle Teniente Coronel Gregorio Pomar 4171/3, y por otro lado, menciona el secuestro del diputado del Partido Comunista Juan Carlos Comínguez. A partir de esas pistas, el juzgado pudo identificar el domicilio exacto y el testimonio de Comínguez permitió conocer que estuvo cautivo allí junto a otros seis militantes del PC, cuatro de ellos aún desaparecidos, y que todos sufrieron torturas.

Hasta el momento hay dos imputados por los delitos cometidos en el CCD Pomar, los exagentes civiles de inteligencia de la SIDE Cesar Estanislao Albarracín y Rubén Héctor Escobar, quienes ya fueron indagados y detenidos. Mientras que Enrique Escobar, hermano del Rubén, también habría sido imputado pero falleció en octubre.

Hasta hace apenas dos años, el único Centro Clandestino de Detención de este circuito era Orletti, ubicado en Venancio Flores 3519/21, reconocido como sede del Plan Cóndor durante la dictadura. Sin embargo, varias víctimas que creían haber pasado por ese lugar recordaban un sótano y características que Orletti no tenía.

En 2020, a partir de testimonios de sobrevivientes y un informe del Programa Verdad y Justicia de la Secretaría de Derechos Humanos, el juzgado de Rafecas logró identificar la sede de Bacacay 3570, una casa con sótano donde también hubo víctimas del Plan Cóndor.

Dos años después, la casa de Pomar completa el circuito represivo en el que si bien no hay víctimas que hayan pasado por los tres lugares los represores fueron los mismos: todos integrantes del grupo OT (Operaciones Tácticas) 18.