El colectivo #NiUnaMenos realizó una nueva marcha en reclamo de “aborto legal ya!” en todo el país, que en Buenos Aires tuvo su punto de encuentro en la Plaza de los dos Congresos. Además, otro grupo, bajo el lema «Vivas, libres y desendeudadas nos queremos», pasó por la zona del Banco Central y reclamó contra el pedido de auxilio al FMI. La movilización se tiñó de pañuelos verdes, acaso el símbolo de la lucha femenina por la aprobación del aborto legal, seguro y gratuito, que se debatirá en la Cámara de Diputados en poco más de una semana, el próximo 13. Una multitud estaba compuesta por jóvenes, estudiantes secundarios, organizaciones sociales, sindicatos y agrupaciones feministas.

Muchas con miradas que transmitían tristeza y bronca, pero al mismo tiempo, la alegría de poder manifestarse. Sin miedo enfrentan las desigualdades de la sociedad. Eran legiones de guerreras reclamando sus derechos y que se legalice la interrupción voluntaria del embarazo. “Venimos a reclamar un derecho, porque nosotras somos quienes tenemos que decidir sobre nuestros cuerpos. Estamos cansadas de ser un objeto del Estado, que nos condiciona a realizar estas prácticas. Además, está comprobado que 400 mil mujeres abortan por año en Argentina, la mayoría de ellas son pobres, lo hacen en la clandestinidad y mueren”, aseveró a Tiempo, Leticia, una de las miles que marcharon. Por su lado, Patricia, contó: “La marcha se está realizando en un contexto muy sensible en el cual se está debatiendo la legalización de la interrupción voluntaria del embarazo. Estamos atravesando un momento histórico en nuestro país y considero que hay que venir a bancar el proyecto”, cuenta Patricia.

“Vengo a la marcha porque aprendí mucho del feminismo, tengo 20 años, y como mucha gente comprendo, que deben legislar urgente. Hay que cambiar las cosas que están mal, nuestra sociedad va evolucionando y es necesario hacer reformas. Las mujeres pobres mueren o van presas, esto es terrible y muy cruel”, finaliza Evelyn. “Siempre vengo a las marchas de #NiUnaMenos, pero hoy con una particularidad, queremos educación sexual para decidir, anticonceptivos para no abortar y aborto legal para no morir. Creo que no hay que caer en el debate moral que hay sobre este tema, pero el Estado tiene que reconocer que la experiencia y la practica indican que esta Ley es necesaria”, explicó Yanina.

La marcha por «Ni una Menos» se realiza todos los años desde 2015 para visibilizar la lucha de las mujeres contra la violencia machista. Con carteles, en los que se leía «Juguemos al ahorcado está muriendo el patriarcado», «No fue la ropa, no fue el lugar fue un machito patriarcal», «El machismo mata» o «Somos el grito de las que no tienen voz», las columnas se extendían varias cuadras hasta la avenida 9 de julio. 

La movilización, realizada con la consigna «Vivas, libres y desendeudadas nos queremos», partió desde Plaza de Mayo con el eje puesto en el proyecto por la despenalización del aborto que se debatirá el 13 de junio próximo en la Cámara de Diputados y con fuertes críticas al gobierno nacional. En el escenario, en el que estaban también las Abuelas de Plaza de Mayo, las manifestantes coincidieron en exclamar que «ni la lluvia nos para, nadie va a poder apagar tanto fuego”. 

Laura Omegas, de la organización Matamba Afrodescendientes, primera oradora del acto, aseguró que «por aquellas que en todos los rincones del planeta se revelan, somos las mujeres, trans, Afrodescendientes, villeras y más… no queremos ser explotadas… vinimos a decir que no nos van a disciplinar más». 

A partir de las 18, la plaza de los Dos Congresos se tiñó de verde ya que miles de personas coparon la avenida de Mayo con sus simbólicos pañuelos a pedido de la inmediata legalización de la interrupción voluntaria del embarazo. El movimiento Ni Una Menos que se impulsó el 3 de junio de 2015 a partir del asesinato de la adolescente santafecina Chiara Pàez, y gracias al puntapié de periodistas, activistas y artistas. Ayer, con el objetivo de «no abandonar el 3J» se realizaron encuentros en Plaza de Mayo para dialogar hacia un «feminismo internacionalista».

Luego leyeron el documento titulado «Sin aborto legal no hay ni una menos. Contra el FMI, el ajuste y la deuda»(ver aparte). Las organizadoras reclamaron por derechos de género, afirmaron su oposición al gobierno nacional y reclamaron la convocatoria a un paro. «En 2015 la fuerza de nuestros pasos y nuestra voz corrió la tierra de su eje. Pusimos en marcha una revolución. En Argentina fuimos 1 millón de personas las que soltamos un solo grito: basta de matarnos. Ni una menos. Vivas nos queremos», reseñaron al inicio del mensaje. Pero «el terremoto no se detuvo ahí» y hoy, «por cuarta vez, las mujeres, trans, lesbianas, bisexuales, no binarias, travestis, indígenas, afrodescendientes, migrantes, villeras y mujeres con VIH estamos acá y en todas las provincias de Argentina, para volver a gritar Ni Una Menos», afirmaron.