El empresario Angelo Calcaterra, primo del ex presidente Mauricio Macri y procesado por presunto cohecho en la Causa Cuadernos, podrá recuperar parte de su fortuna retenida en cuentas bancarias en el marco de esa investigación. Así lo determinó un fallo de la Cámara Federal firmado por los jueces Pablo Bertuzzi y Leopoldo Bruglia, que –a instancias de la Cámara Federal de Casación Penal- consideró que la retención de ese dinero era “una extralimitación”.

El fallo, que fue notificado recientemente a las partes, sostiene que Calcaterra cumplió en exceso con el monto del embargo que le había fijado inicialmente el juez Claudio Bonadio y que fue sustancialmente reducido por la Cámara Federal.

Calcaterra, como referente de la empresa IECSA, está vinculado en dos expedientes relacionados con la Causa Cuadernos. Bonadio lo embargó primero por 400 millones de pesos y luego amplió ese monto a dos mil millones, pero la Cámara lo redujo a cien millones.

El empresario presentó dos propiedades para cubrir el embargo: un campo en Mendoza y un edificio de cuatro cocheras en la Capital Federal.

La defensa de Calcaterra, a cargo del abogado Fernando Díaz Cantón, recordó que “el embargo sobre dos inmuebles suficientes ofrecidos por su defendido” fue la herramienta que permitió “dejar sin efecto la inhibición general de bienes vigente”.

“La afectación al derecho de propiedad reclamada en autos radica, precisamente, en que los embargos decretados están cubiertos con los inmuebles de mi pupilo.  Y, aun así, no se le reintegra el dinero que se le retuvo antes de que cubriera los embargos con dichos inmuebles”, añadió el defensor.

La Cámara de Casación le dio la razón: “las sumas de dinero retenidas cuya devolución se pretende no se encuentran fundadas en medida cautelar alguna en el marco de la presente causa y que el embargo dispuesto respecto de Ángel Jorge Antonio Calcaterra se encuentra satisfecho”.

El fallo añadió que “ha sido levantada su inhibición general de bienes”, por lo que mantener la retención del dinero reclamado “luce en la actualidad como una extralimitación”.

El máximo tribunal penal revocó el fallo y le ordenó a la Cámara Federal que dictara uno nuevo, con arreglo a esas consideraciones.