Una familia, según define la Real Academia de la Lengua Española, es un grupo de personas vinculadas por relaciones de matrimonio, parentesco, convivencia o afinidad. Aunque resulte curioso, la entrada de la palabra nunca establece variables emocionales como condición de pertenencia a este tipo de clanes. Es decir que mientras un contrato legal, la deriva genealógica, la decisión de compartir el espacio vital e incluso una mera e inespecífica afinidad resultan esenciales para establecer qué cosa es (y qué cosas no son) una familia, sentimientos como el afecto o el cariño no tienen lugar en la ecuación.
Si bien a priori esa exclusión puede parecer rara, la Real Academia tiene razón: los padres pueden rechazar a sus hijos o los hijos odiar a sus padres o hermanos, pero seguirán siendo familia. Lo mismo ocurre con el matrimonio, cuya definición menciona ritos, formalidades, intereses y vida en común, pero tampoco dice nada del amor.
Un álbum familiar

Ese mismo concepto es el que parece regir el libro Mr & Mrs, donde la artista y fotógrafa venezolana Suwon Lee reúne como en un álbum las fotografías de sus abuelos paternos, de origen coreano, a partir de un dispositivo particular. La autora decidió tomar únicamente los rostros de sus ancestros y ordenarlos de forma cronológica, haciendo que cada página contenga solo una foto: las de su abuelo de un lado del libro, las de su abuela del lado opuesto.
Esta disposición crea dos recorridos que en lugar de avanzar juntos y en paralelo, corren enfrentados, permitiendo que el encuentro de la pareja recién sea posible a mitad del libro, luego de la última foto individual de cada uno, que los retrata ya en la vejez. Como si el matrimonio que los unió hubiera sido eso: dos historias contadas por separado, cuyo único elemento en común es el punto final.

Frente a cada fotografía, una página en blanco. En el centro de cada una se leen fragmentos de un texto, nunca más de cuatro o cinco palabras, en los que, a modo de confesión, ambos narran su propia vida en primera persona. Además, cada texto está compuesto por una tipografía distinta, utilizando una despojada fuente sans-serif para el relato del abuelo, mientras que para la abuela se eligió un tipo serif, más coqueto y adornado. El libro también tiene dos tapas: de un lado, una con los ojos de ella (Mrs) y del otro, una con los ojos de él (Mr). El resultado es lo más parecido a una cinta de Moebius hecha libro.
La lectura conjunta de los dos textos (escritos por el español Horacio Fernández, especialista en historia de la fotografía) construye un melodrama en el que sus protagonistas, los abuelos de la autora, son las víctimas inocentes de un casamiento arreglado, práctica habitual en Corea durante gran parte del siglo XX. El relato de una tragedia fundacional en el que, como en el diccionario, amor y felicidad tampoco parecen haber tenido un lugar.

Curiosamente, aunque Mr & Mrs es un álbum de fotos que cuenta la historia triste de un vínculo de deseos nunca compartidos, el libro fue publicado gracias al esfuerzo conjunto de dos sellos: Editorial RM, de España, y el argentino Goma Editora. Un matrimonio editorial surgido quizás también de la mutua conveniencia, pero que fue capaz de dar a luz este libro exquisito, en el que Suwon Lee se abraza a su legado familiar con la amorosa ternura que sus abuelos nunca pudieron compartir.
Un año de Goma Editora
La editorial argentina detrás de la publicación de Mr & Mrs, de la venezolana Suwon Lee, es Goma Editora, fundada hace un año. Dirigido por la argentino-venezolana María Antonia Rodríguez, el sello se especializa en distintas vertientes de la poesía, de la literatura al diseño y de la fotografía a la ilustración. Entre sus libros publicados se destaca una particular edición del extenso poema La ciudad, del chileno Gonzalo Millán (1947-2006), impreso con tinta “invisible”. Para poder leerlo se deben raspar las páginas con una moneda de $10 pesos chilenos, incluída en el libro. Debido a esta característa, esta versión de la obra de Millán se publicó bajo el título de La ciudad oculta.