Tras el temporal que sacudió a Miramar, el gobernador Axel Kicillof viajó este miércoles hasta ese distrito y se reunió con el intendente local, Sebastián Ianantuony, para coordinar la ayuda provincial frente a los daños generados por la tormenta que dejó como saldo dos víctimas fatales, 17 heridos y cuantiosos daños materiales.

«Hemos puesto a disposición del municipio diferentes instrumentos para colaborar con las tareas necesarias y asistir a los damnificados», señaló en declaraciones a la prensa y remarcó la presencia del Estado bonaerense tras eventos climáticos de este tipo. «Como siempre hemos hecho ante estas situaciones, la provincia de Buenos Aires asume el compromiso de estar presente para ayudar a los vecinos y vecinas afectadas», remarcó.

La Provincia destinó personal de la Policía y de Defensa Civil para colaborar con las tareas necesarias, así como también tres autobombas 4×4, seis camionetas, motosierras y equipamiento necesario para despejar las calles en las que haya árboles caídos por el temporal. También hubo asistencia social, en materia de salud mental y una línea crediticia del Banco Provincia.

Kicillof destacó el rol que cumple el Estado frente al cambio climático y eventos de este tipo, para diferenciarse una vez más del presidente Javier Milei, quien en el caso de Bahía Blanca resolvió no otorgar ninguna ayuda nacional. «Los que niegan el cambio climático que vengan a Miramar, que hagan un recorrido por Bahía, no una visita relámpago», señaló en alusión a lo que pasó en diciembre. Y agregó: «Negar esto es como tratar de tapar el sol con la mano».

En la misma línea, criticó el plan económico, el DNU y la Ley Ómnibus que se discute en el Congreso Nacional, todas medidas que son rechazadas de plano por el mandatario. «Hay que dar respuesta desde el Estado, acompañamos en las buenas y en las malas. Lamentamos que hemos tenido un despliegue muy importante en educación y salud y en estos días estamos discutiendo lo que nos espera…», señaló el gobernador en relación a los fondos nacional. Y lanzó una advertencia: «Las provincias no son una carga, esperamos que no haya decisiones desfavorables que le pongan límite a las provincias cortando fondos porque tenemos que terminar las obras».

Desde la Gobernación se detalló que, además de la colaboración de la policía y Defensa Civil, el Ministerio de Desarrollo de la Comunidad, en tanto, envió chapas, tirantes, clavaderas, colchones, frazadas, tres toneladas de alimentos, bidones de agua y kits de limpieza. El Ministerio de Salud dispuso la intervención de profesionales especializados en salud mental para acompañar a las familias más afectadas.

Por último, el Banco Provincia puso a disposición de los vecinos de Miramar la línea de créditos que tiene con tasas especiales para personas, comercios, microemprendimientos y empresas damnificadas por fenómenos naturales.