Por primera vez desde la vuelta de la democracia en 1983, los medios públicos estarán silenciados durante la marcha de este domingo. Como parte del plan para abrirle la puerta a los privados, el gobierno apagó el servicio de la agencia Télam y suspendió su web desde el 4 de marzo pasado. Esta semana el recorte llegó a la Televisión Pública, donde las nuevas autoridades cancelaron los noticieros del fin de semana justo en la previa de la marcha por Memoria, Verdad y Justicia. “Buscan consolidar una televisión de propaganda”, señalaron los trabajadores al denunciar el despido de 10 periodistas. En Radio Nacional tampoco habrá móviles durante la manifestación que a 48 años del golpe militar volverá a gritar “Nunca Más”. En ese contexto, la cobertura estará en manos de los trabajadores y las trabajadoras que, en unidad, realizarán distintas propuestas -radio abierta, cobertura en las calles y noticiero- con un doble objetivo: garantizar el derecho a la información y mantener activo el reclamo por la reapertura de la agencia nacional, cuyas sedes centrales siguen valladas por la Policía. “Es una catástrofe que no haya cobertura de la marcha en los medios públicos. Forma parte de un plan de gobierno que solo vino a generar destrucción y que necesita un apagón informativo para tapar la pobreza”, evalúa Agustín Lecchi, secretario general del Sindicato de Prensa de Buenos Aires (Sipreba).

Esta semana, el gremio denunció la censura que aplican las autoridades de la TV Pública que, como Télam y Radio Nacional, transita una intervención a cargo de Diego Chaher. “Se trata de otro acto antidemocrático de este gobierno: un nuevo intento de silenciar a la prensa que no es afín a sus intereses”, caracteriza el comunicado y enumera casos que ejemplifican el nivel de control que ejercen sobre lo que se puede o no mostrar. La lista incluye nombres prohibidos -como Pablo Moyano, Sergio Palazzo o Eduardo Belliboni-, representantes políticos vedados por cuestionar al oficialismo o acontecimientos de interés público en el país que no se cubren, entre otros puntos.

Ante este cuadro, las trabajadoras y los trabajadores realizarán una cobertura desde Somos Télam, página que está al aire desde que el gobierno suspendió el servicio de la agencia nacional de noticias y publicidad. “Queremos que la web sea la ventana de todos los conflictos como paso para la articulación de todo el movimiento obrero organizado”, remarca Andrea Delfino, delegada de la empresa estatal. A las 11:30 arrancará una transmisión radial desde Bolívar 531, uno de los puntos del acampe, mientras que durante el día habrá contenidos en las redes y el portal. Después de los actos, a las 19, se realizará un noticiero en vivo desde la puerta de Télam junto con los trabajadores de la TVP.

«Que los trabajadores se organicen para garantizar la cobertura del 24 demuestra el profesionalismo y la defensa de la información como derecho que existen en los medios públicos», resume Lecchi.