Con el supuesto objetivo de la «eficiencia», la Secretaría de Transporte de la Nación anunció que dejarán de subsidiar a 1637 colectivos en el AMBA, lo que puede provocar menos unidades en circulación y el acrecentamiento del conflicto con las empresas y los choferes. Horas antes, la UTA ya había advertido el riesgo de que «en los próximos días no haya transporte público de pasajeros en el Área Metropolitana», por el incumplimiento del gobierno con el sector empresario.

«La Secretaría de Transporte realizó un estudio del sistema automotor e implementó una medida para eficientizarlo, que ya arrojó los primeros resultados: se subsidiaban innecesariamente 1.637 colectivos en el AMBA. Al dejar de subsidiarlas en marzo, el Estado se ahorrará 6.200 millones de pesos por mes. Por primera vez en muchas décadas el Gobierno Nacional está llevando adelante un relevamiento y análisis de cada unidad de colectivo que subsidia en el Área Metropolitana de Buenos Aires, al poner en marcha una medida que vincula la validadora SUBE que lleva cada unidad con la patente o dominio del colectivo», informó la cartera.

De esta manera –según aseguran–, harán «una fiscalización más precisa» en relación al recorrido que realiza cada unidad, «siendo más eficientes en el reconocimiento de costos».

El número significa casi el 10% de los colectivos que funcionan en el AMBA. «El estudio del sistema automotor determinó graves irregularidades. El Estado Nacional repartía subsidios para un parque automotor de 18.300 colectivos, pero nunca controló si esa cantidad era necesaria o si los colectivos recorrían la cantidad de kilómetros adecuada. Es decir, se desmanteló un grifo de derroche, ineficiencia y oscuridad que nos costaba muy caro”, aseguró Manuel Adorni, vocero presidencial.

«Los relevamientos arrojaron como resultado que muchos colectivos recorren una cantidad promedio de kilómetros menor a lo eficiente, esto demuestra que el sistema requiere ajustes para asignar de forma más eficaz los recursos nacionales. Otro factor esencial para lograr una asignación más eficiente en los gastos del Estado es la nominalización de la tarjeta SUBE por parte de los usuarios que permitirá una mayor transparencia en el sistema. Hasta el momento, en los últimos meses se registraron cerca de 2 millones de tarjetas, alcanzando un promedio de 50 mil nominalizaciones por día», acotó Transporte.

La advertencia de la UTA

Quien salió a hablar en las últimas horas fue la Unión Tranviarios Automotor (UTA). El gremio advirtió en sus redes «a la población» que ante «el incumplimiento» del acta acuerdo firmada por las partes referente a la recomposición salarial, de los trabajadores nucleados en la UTA, «se corre riesgo que en los próximos días no haya transporte público de pasajeros en el AMBA».

Esta situación, según afirman, está motivada «por el reclamo que públicamente está haciendo el sector empresario ante el Ministerio de Economía por la falta de compromiso con lo acordado en dicha acta, a través de la Secretaría de Transporte, para que este pueda seguir operando regularmente».