El historiador vive con su hijo Gustavo en una propiedad situada en la calle Asamblea al 800. El problema comienza en 2009, cuando  su hija, la psicóloga Laura Galasso, quien hace tiempo se apartó de su familia de origen, lo invitó a una reunión en la que su terapeuta le sugirió a Norberto Galasso que haciera una sesión de derecho de esa propiedad a favor de su hija, un hecho que la haría sentir más segura psicológicamente.

Desde entonces, comenzaron a precipitarse una serie de circunstancias, algunas de ellas de gran violencia de parte de quienes pretenden quedarse con la propiedad, según le dijo Galasso a Tiempo Argentino.

Tales circunstancias  lo obligaron al historiador a emprender determinados juicios con el objeto de protegerse. El primero de ellos tiene como objeto  evitar ser despojado de esa propiedad de la que tomó posesión ilegalmente su hija junto a quienes la acompañan en esta maniobra.  El segundo está relacionado con un préstamo tomado por estas personas a través de la hipoteca sobre esta propiedad que no fue pagado, por lo que dicha propiedad sería rematada en breve, ya que los acreedores hipotecarios también iniciaron un juicio.

Galasso lleva escritos más de 100 libros de historia argentina, pese a lo cual ha mantenido siempre un perfil muy bajo. De una ética inquebrantable y renuente a la exposición en los medios, hizo de la modestia una forma de vida. La vivienda que heredó de sus padres y cuya posesión hoy se ve amenazada es el único bien mueble que posee. 

Si decidió dar a conocer este video en las redes es porque la situación que está viviendo es muy grave ya que, si la orden de desalojo se concreta, en poco tiempo perderá su casa  sin tener otra alternativa de vivienda.

Foto: Diego Martinez @ildieco_diegomartinezph

Compañeros  y alumnos del historiador expresan su solidaridad juntando firmas para solicitarle al juez “que interviene en la causa se sirva resolver con justicia y sentido común y rechace cualquier demanda que implique su desalojo; así como también al Estado Nacional, que tome las medidas necesarias para poner en resguardo este espacio de trascendencia que hoy debería ser patrimonio de la cultura nacional”. 

El documento destaca que la contribución de Galasso a  “la historiografía nacional, desde la perspectiva de los movimientos populares, es enorme, tal como lo acreditan más de un centenar de libros publicados, así como una enorme cantidad de artículos en diferentes medios, entrevistas y conferencias brindadas en todo el país, durante muchas décadas.”

Y agrega: “Ello le ha merecido, en reconocimiento a su labor, los títulos de Ciudadano Ilustre otorgados por las legislaturas de la Provincia de Buenos Aires y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires; así como diversas distinciones otorgadas por destacadas instituciones académicas. Recibió el título de Doctor Honoris Causa por parte de la Universidad Nacional del Comahue, la Universidad Nacional de San Juan y la Universidad Nacional del Oeste; y de Profesor Honorario por parte de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires, la Universidad Nacional de Lanús, la Universidad Nacional de Quilmes, entre otras.”

Foto: Diego Martinez @ildieco_diegomartinezph

Entre las personas e instituciones que pusieron su rúbrica figuran  la Asociación Madres de Plaza de Mayo, Taty Almeida, Juan Grabois, Alicia Castro. Osvaldo Papaleo, Julio De Vido, Stella Calloni, Dora Barrancos, Mario Oporto, Daniel Catalano, Héctor Pedro Recaldi, Jorge Rivas, Jorge Rachid, Hugo Chumbita, Ernesto Jauretche, Bernarda Llorente y siguen las firmas.

A lo largo de su larga y meritoria trayectoria  Galasso cosechó el cariño y el respeto de quienes lo conocieron, por lo que son muchos los que esperan que este conflicto tenga una resolución positiva que lo libere de la angustia de perder la casa en que vive.