La Copa de la Liga que ya inició la tercera fecha recibe el nombre de la empresa de criptomonedas Binance, que le pagará a la AFA cerca de 40 millones de dólares en cinco años. Huracán fue el primer club con un sponsor criptomoneda en la camiseta: Decrypto. River, último campeón de la Liga, lleva en las mangas a la casa de apuestas online Codere, que a partir de julio pasará sobre la banda roja. B-Play se inscribe en el pecho de las camisetas de Vélez y Estudiantes de La Plata. City Center Online, casa de apuestas del Casino de Rosario, auspicia desde 2022 a los clubes de la ciudad: Central y Newell’s. River, Independiente y Racing cerraron acuerdos con Socios.com, una empresa de fan tokens, un tipo de “criptoactivos” que, a diferencia de las criptomonedas, usan de base a un tercero (los clubes). El fútbol argentino tiene hasta un club criptomoneda: Deportivo Zoe, en el Torneo Regional, fundado en 2020 por Leonardo Cositorto, sobre quien la justicia pidió la detención por estafa y defraudación. Cositorto, la cara del holding financiero Generación Zoe, fuera del país tras la denuncia, también volcó dineros en Deportivo Español y Chacarita. Las casas de apuestas y las criptomonedas aparecen como nuevos mecenas del fútbol, siempre plataforma de legitimación social, y más en el argentino, empobrecido por el dólar.

Las casas de apuestas como publicidad en el fútbol están prohibidas en Italia y España por el aumento de la ludopatía y la sombra de los arreglos de partidos. Y las empresas de criptomonedas son ahora cuestionadas en Inglaterra por la Autoridad de Estándares de Publicidad a partir de “la falta de conocimiento de los consumidores”. Arsenal había firmado un contrato con Socios.com: animaba a los hinchas a comprar una criptomoneda, el Chiliz, y a intercambiarla por “fichas” que otorgan el derecho a votar en decisiones como qué frases irán en el vestuario o los contenidos en las redes sociales del club. La AFA rompió con Socios.com y firmó un contrato con Binance, al que presentó con un lenguaje de la mercadotecnia: “Main Sponsor Global, Fan Token Oficial y Naming Sponsor de la Liga Profesional de Fútbol”. Es la empresa que más le paga después de Adidas (más de 20 millones de dólares por año). Socios.com, que había entrado nueve meses antes a la AFA con un contrato por tres años, avisó que iniciará una demanda legal millonaria. La AFA adujo en la ruptura “falta de cumplimiento en los pagos, mala explotación de las marcas y depreciación del precio del Fan Token $ARG”. “Este acuerdo con Binance reúne todas las condiciones que buscamos”, dijo Claudio Tapia, presidente de la AFA. “El fútbol y las criptomonedas son vida en Argentina”, le devolvió He Yi, cofundadora de la china Binance.

Sea como fuera, el dinero real -y falso- pesa en Deportivo Español, que juega en la Primera C, cuarta categoría del fútbol argentino. Español, protagonista en Primera durante los 80 y 90, superó una quiebra, resistió el intento de Mauricio Macri de convertirlo en sociedad anónima y perdió terrenos a manos del gobierno de la Ciudad. Cositorto y Diego Elías, presidente de Español, firmaron un acuerdo hasta 2025. “No es un gerenciamiento”, se apuró en aclarar Elías. Gracias a Cositorto y a la criptomoneda Zoe Cash llegaron Ricardo Caruso Lombardi como mánager y el arquero Pablo Migliore. En la primera fecha de la Primera C, Español empató 1-1 ante Midland de visitante. Si ganaba, había 100 mil pesos para repartir entre los futbolistas, a los que ya les pagaron premios en Zoe Cash, que cotiza hoy a US $0.040, después de la caída del 94% del máximo histórico a raíz de la denuncia por estafa piramidal. Leandro N. Alem, también en la C, había sido el primer club argentino en pagarle a los jugadores en criptomoneda (Tether). “Esta moneda (por la Zoe Cash) se viene posicionando y en unos meses va a estar respaldada por un gramo de oro cada unidad, o sea 55 dólares”, había vaticinado Cositorto.

Chacarita, que juega en la Primera Nacional, segunda categoría del fútbol argentino, firmó un acuerdo por un año con Zoe como principal patrocinador. En el último mercado de pases sumó a 25 futbolistas. Entre ellos, al arquero Gastón Brambatti, que viene de jugar en Cañuelas -primer club al que accedió Cositorto- y Español. Brambatti es uno de los jugadores “evangelizadores” de Zoe: mete a los compañeros al sistema. “Somos ajenos a lo que se habla en la opinión pública”, dice un dirigente de Chacarita. Pero Cositorto no sólo banca: creó los clubes Zoe. Deportivo Zoe, que juega de local en Español, perdió en una semifinal del Regional ante Sportivo Baradero en el camino a uno de los cuatro ascensos al Federal, escalón previo a la Primera Nacional. Y tiene otro club, en Córdoba: el Zoe Atletic, que juega en la Liga Villamariense. El “coaching ontológico”, la “educación financiera” y la “oportunidad de negocios” cruza la frontera: Tacuary, que ascendió a la primera división de Paraguay, está bajo investigación después de que allanaran las oficinas de Zoe en Asunción por “ofrecer inversiones sin contar con las autorizaciones correspondientes”. En España, Zoe maneja al Atlético Saguntino; en Andorra, al Unió Esportiva Santa Coloma; en Tailandia, al Thawi Watthana Samut Sakhon United; y en Finlandia, al Oulun Työväen Palloilijat. Es, ironizaron en las redes sociales, el “Cositorto Group”, investigado en Argentina por la Comisión Nacional de Valores, la Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos, y la Inspección General de Justicia.

Las casas de apuestas online y las criptomonedas acaso construyeron el gran puente en Ganancias Deportivas, una empresa de apuestas que recibía dinero de usuarios y lo transformaba a la hora de operar en criptomonedas. Ganancias Deportivas prometía una efectividad del 70% en la predicción de los resultados de los partidos de fútbol, principalmente de España, sede de la firma, a partir de un “equipo de tipsters (informantes) profesionales”. Se calcula que más de 40 mil mendocinos fueron estafados: 30 mil de la ciudad de San Rafael, donde viven 120 mil personas. Es, según la justicia que investiga a Ganancias Deportivas por estafa piramidal, el mayor fraude de la historia argentina en número de afectados. La publicidad de casas de apuestas online en el fútbol entró en Sudamérica con el guiño de la Conmebol, que tiene a Betfair como patrocinadora de los torneos continentales desde 2019. A finales del año pasado, la Conmebol además se alió con Crypto.com. Argentina no iba a ser la excepción: en junio, la AFA firmó un convenio con Genius Sports para capturar y distribuir los datos “oficiales” de los campeonatos (3300 partidos de 13 categorías) y luego venderlos a las empresas de apuestas online, habilitadas en Capital y Provincia de Buenos Aires. “En Argentina vamos a ver mucha presencia del juego online en el fútbol”, le dijo al sitio especializado Yogonet Guillermo Cuccioletta, gerente de Marketing de B-Play, la empresa que aparece en las camisetas de Vélez y Estudiantes de La Plata.

En la reciente final del Mundial de Clubes que Chelsea le ganó a Palmeiras en Emiratos Árabes Unidos, el francés Alexandre Dreyfus estuvo entre los invitados al palco vip de la FIFA. Dreyfus es el CEO de Socios.com, la empresa con sede en Malta que vende fan tokens y comercializa la criptomoneda Chiliz, con contratos en más de 56 clubes -entre ellos, River, Independiente y Racing-, y flamante socia de la UEFA. “La sociedad de la UEFA con Socios.com legitima las inversiones de riesgo con activos financieros poco regulados y altamente volátiles -expresó la organización de hinchas Football Supporters Europe-. La mayoría de los inversores de Socios.com que tienen fan tokens son especuladores de la criptomoneda, no hinchas de fútbol”. Chelsea, el campeón del Mundial de Clubes, rompió un contrato de patrocinio en 2019 con la casa de apuestas rusa 1xBet después de que el gobierno británico advirtiera que promovía apuestas en “deportes infantiles, peleas de gallos y un casino pornográfico”. Palmeiras, el subcampeón, cambió de publicidad en la camiseta en 2022: dejó a la casa de apuestas Dafabet ante el mejor contrato de patrocinio de Latinoamérica, del banco Crefisa. En Brasil, ocho empresas de casas de apuestas online aparecieron en las camisetas de 17 de los 20 clubes en el último Brasileirão. El fútbol argentino, parece, aún está a tiempo de elegir.