«Logramos una importante medida. La cuota de ningún crédito UVA superará el 35% del ingreso familiar. Los bancos Nación y Provincia van a subsidiar la cuota de los hipotecados UVA que lo superen. Además, los deudores del fideicomiso Procrear modalidad UVA administrados por el Banco Hipotecario migrarán a la fórmula HogAR, que actualiza según la evolución de los salarios», fue el anuncio que hizo el ministro de Desarrollo Territorial y Hábitat, Jorge Ferraresi, el viernes último.

La reacción de los hipotecados UVA agrupados no fue la esperada por el gobierno. Paola Gutiérrez, referente de la agrupación a nivel nacional, expresó a Tiempo: «Nos deja en un lugar incómodo frente a la opinión pública. Nunca pedimos subsidios, sino que los bancos ganen menos, con un tope de indexación. Los subsidios tienen que ir para gente que no tiene un plato de comida en la mesa, en este momento tan duro que vive el país».

Respecto de los bancos, Gutiérrez abundó: «Evidentemente, la voluntad de (Miguel) Pesce (presidente del Banco Central) de estar en defensa de los bancos fue más fuerte. Los bancos, ni en sus mejores proyecciones, pensaban ganar lo que ganan con los UVA». La referente agregó: «La medida es un parche. Necesitamos una ley y nos mandan a negociar con los bancos individualmente. Va a ser una sangría. Se sostiene la política del macrismo».

Marcelo Mercere, damnificado y abogado del colectivo en Buenos Aires, explicó: «El 35% como tope de afectación es alto. Al momento de firmar los créditos, al calificarnos, la relación cuota-ingreso era del 25%. O sea, no se condice con las condiciones iniciales. El 10% de diferencia es mucho para un grupo familiar».

Al igual que Gutiérrez, Mercere reclamó una ley que modifique las condiciones de los créditos indexados. «La solución tiene que ser integral, no segmentada», aseguró al tiempo que criticó el actual plan de convergencia, dispuesto para establecer un puente entre la salida del congelamiento y la «normalidad» de la cuota indexada. A lo largo de 18 meses, la cuota va convergiendo hacia el valor real, lo que hace que suba 6 o 7% mensual. Mercere calculó que por ese mecanismo la cuota de un deudor que ingresó a los dos congelamientos subirá un 100% este año. «¿Qué trabajador puede afrontar un aumento de ese tipo?”, se preguntó el abogado.

Insustentable

El anuncio, además, hace que 7655 familias, pertenecientes al sistema de créditos Procrear del banco Hipotecario, pasen de ajustar por UVA a la fórmula HogAr, que ajusta por un índice salarial. Pero los hipotecados UVA son más de 100 mil.

«Tuviste cuatro años con pérdida real del poder adquisitivo y en uno empataste. Es imposible sostener una indexación por inflación. Tiene que ser algo atado a la evolución de los ingresos. Debe ser algo que te de previsibilidad», apuntó Mercere.

Al ser consultadas por estas críticas, fuentes del Ministerio de Desarrollo Territorial dijeron a este medio que «es lógico que no todos queden conformes y es un tema muy complicado de resolver, pero se están tomando medidas para beneficiar a los deudores».

La situación de los deudores es muy difícil de sostener. Alguien que en enero de 2018 obtuvo un crédito por dos millones de pesos, con tasa del 5% a 20 años (equivalente a unos U$S 105 mil), empezó pagando una cuota de $ 13.200. En abril de 2021, esa cuota se ubicó en $ 38.000. Además de la suba en la cuota, esa persona le debe al banco $ 6.100.000; es decir, la cuota subió casi un 200% y la deuda, poco más del 200 por ciento. Siempre y cuando no se haya atrasado en ningún pago.

Esta situación ha derivado en juicios de desalojo de deudores sin capacidad de pago. Ese es el caso de Marcelo Macaluso, quien debe hoy $ 9 millones, por un crédito por $ 2 millones obtenido en 2017. Desde el colectivo advirtieron también que algunos deudores optan por vender la casa a precio vil y resignando todo lo abonado hasta el momento.

Cabe recordar que un requisito indispensable para obtener el crédito era que se trate de una «vivienda única y familiar».

En tanto, se dispuso que el Banco Central será la entidad a cargo de monitorear y garantizar las disposiciones de la cartera conducida por Ferraresi. Según las relaciones cuota-ingreso declaradas por las entidades financieras otorgantes para cada una de las financiaciones, «más del 90% de las personas deudoras enfrentará una relación cuota-ingreso inferior al 35% en julio de 2022, cuando finalice el cronograma de convergencia», apuntaron desde la entidad.