Un impresionante “Canoazo” tuvo lugar en las inmediaciones del Congreso de la Nación. En el marco de la Ley General de Tierra, Techo y Trabajo, se llevó a cabo la protesta que buscó impulsar la Ley de Pesca Artesanal. Se vendieron más de 8.000 kilos de pescado a precios populares. Tomaron la palabra el máximo referente de la Unión de los Trabajadores de la Economía Popular (UTEP) Juan Grabois, las secretarias generales adjuntas de la UTEP, Dina Sánchez y Norma Morales y el integrante del secretariado nacional de la UTEP y de la Federación Pesquera Argentina, Carlos Abad, junto a pescadores artesanales.

En diálogo con ANSOL, el diputado nacional que presentó el proyecto de ley en el Congreso, Federico Fagioli, explicó: “Es clave poder avanzar en un proyecto de ley que venimos construyendo con los protagonistas, que son los pescadores que llevan adelante un trabajo muy sacrificado, con todos los derechos vulnerados, sufriendo las extorsiones constantes del mercado, que los ningunea y que les paga muy poco por su trabajo”.

“El objetivo de la ley es empezar a dotar de derechos a ese sector que garantiza alimentos, en un momento tan crítico que vive el país con la inflación, con los precios muy altos de los alimentos, de imposibilidad de muchas familias de acceder a todos los alimentos. Queremos avanzar en el fortalecimiento de la pesca artesanal, dotarla de derechos y que el pescador pueda comercializar directamente al público y no depender de los intermediarios, que siempre especulan con su trabajo”, apuntó Fagioli.

Este último punto es una de claves de la problemática de la pesca artesanal: se paga poco al productor y se cobra mucho al consumidor. En detalle, lo explicó a este medio Matías Casimir, responsable nacional de pesca artesanal marítima en la Secretaria de Agricultura Familiar, Campesina e Indígena: “Mientras los productores reciben 50 pesos por un pescado, en la góndola se vende a $ 600. Creemos que mejorar los marcos legislativos contribuyen a que estos esquemas puedan modificarse y que no tengan siempre a los mismos perdedores, que son los productores y las familias”.

“Nuestro país tiene deudas históricas con la pesca artesanal. Las y los pescadores tienen condiciones de vida muy duras desde hace muchos años. Entendemos que para transformar la cuestión debemos avanzar en un marco legal que garantice los derechos constitucionales de estos trabajadores”, completó Casimir.

El coordinador de pesca artesanal de la Secretaria de Agricultura Familiar, Campesina e Indígena, Carlos Bértola, dio a ANSOL su punto de vista: “Con este Gobierno, es la primera vez que existe un cargo institucional del área. Encontramos un sector que está pescando desde siempre, bastante atomizado, con muchas problemáticas. Por eso, venimos a apoyar esta Ley. Hemos implementado medidas como el programa Potenciar Pesca, que brinda un Salario Social Complementario, pero es muy dificultoso por la exigencia de registros y las diferencias que hay entre provincias al respecto”.

En el mismo sentido, Bértola advirtió que “toda la normativa está armada para la industria pesquera y, con ese esquema, ocurre con el pescado lo mismo que con el trigo o el maíz: termina con precio de exportación”.

La voz de los pescadores

Julio Cardozo es presidente de la Federación de Pesca Artesanal de Río y planteó: “No podemos trabajar en los ríos como merecemos. Somos muy golpeados y necesitamos una ley nacional que nos reconozca porque somos productores de los ríos. Agradecemos a la UTEP por el acompañamiento”.

Andrés es pescador de la cooperativa Trabajo La Boya y contó a este medio su visión: Andrés: “Estamos tratando de hacer visible nuestra problemática, tanto por el lado de los intermediarios como por la burocracia de los papeles que nos exige el Gobierno. Sufrimos discriminación por el lado de Prefectura, que no nos dan facilidades con el tema de los papeles y ellos mismos nos persiguen en el agua para impedirnos trabajar. Estamos trabajando por esta Ley y queremos ser escuchados”.

Detalle y presentación oficial de la Ley de Pesca Artesanal

Carlos “Caio” Abad, de la Federación Pesquera, describió: “El proyecto de Ley tiene cuatro aspectos centrales: Creación de un Registro Nacional de la Pesca Artesanal; Creación de terminales pesqueras, que serán centros de procesamiento, comercialización, acopio, distribución y agregado de valor; Creación de los consejos de cuenca, con un claro protagonismo de la pesca artesanal; Creación de un fondo de fomento para la Pesca Artesanal, para el fortalecimiento del sector en general y de las cooperativas en particular”.

“Esta propuesta se da en el marco de la Ley de Tierra, Techo y Trabajo que impulsa la UTEP expresa y encarna la demanda de muchas propuestas de las distintas ramas del amplísimo universo de la economía popular, en la demanda legislativa, pero también en la demanda programática, de creación de políticas públicas, de programas de distintos ministerios, áreas y reparticiones. Son todas demandas de reparación de derechos básicos del sector de la economía popular, que es hoy en día el 50% de la población económicamente activa, que se encuentra desplazada de derechos sociales y laborales y trabajando en condiciones de precariedad y de invisbilidad también”, consideró Abad.

Al mediodía, dentro del Congreso, se realizó un acto para presentar la iniciativa de manera formal. El mismo contó con un panel encabezado por el diputado nacional Fagioli. Expusieron los diputados nacionales Natalia Zaracho y Leonardo Grosso; el secretario general de la UTEP, Gringo Castro; los citados Casimir y Bértola, y pescadores artesanales. También acompañaron la presentación los diputados nacionales Germán Martínez, Daniel Arroyo, Paula Penacca y Carlos Selva.