Luego de las audiencias públicas, una prórroga en los plazos para definir el aumento y alguna turbulencia política, el gobierno nacional anunció una aumento promedio del 6 por ciento en la factura del gas para los usuarios residenciales y de un 4% promedio para las pymes y comercios.

El Ente Nacional Regulador del Gas (Enargas), a través de las Resoluciones ENARGAS N° 149/21; 150/21; 151/21; 152/21; 153/21; 154/21; 155/21; 156/21; 157/21; 158/21; y 159/21, aprobó los cuadros tarifarios de transición conforme la adecuación tarifaria prevista en los Regímenes Tarifarios de Transición (RTT) de las Licenciatarias de Transporte y Distribución de gas por redes.

“Con esta decisión, se logró un abaratamiento del servicio público del orden del 55%, respecto de lo que hubiera surgido de mantener vigentes las tarifas de la gestión anterior”, apuntó el interventor del Enargas, Federico Bernal.

La opinión de los consumidores

Fernanda Lacey, especialista en materia energética de la ONG Unión de Usuarios y Consumidores, dio a Tiempo su punto de vista: “Apoyamos el menor aumento posible porque consideramos que hubo un aumento desmedido en la gestión anterior y que el usuario, en este contexto de pandemia y de pérdida de poder adquisitivo, no puede pagar más”.

“Tanto la luz como el gas son servicios públicos, esenciales y se tiene que garantizar el acceso de la ciudadanía. Compartimos la mirada de este Enargas, que es muy distinta a la de la gestión anterior. A nivel economía, el Estado verá de qué manera resuelve la ecuación, pero el bolsillo de los ciudadanos no soportan más incrementos”, remarcó Lacey.

La especialista alertó que durante la presidencia de Mauricio Macri “hubo gran cantidad de morosidad y mucha gente que se quedó afuera de la red de gas”. Además, con el auge del teletrabajo “aumentó mucho el consumo”.

El gobierno trabaja en una segmentación de usuarios con el fin de afinar el lápiz en el destino de los subsidios. En ese sentido, Lacey opinó: “Lo vemos bien, pero si no se hace con sumo cuidado se pueden cometer muchas injusticias. Más allá de cruzar datos, consideramos necesario un estudio socio-ambiental presencial que permita ver las características de las viviendas, de las familias; un seguimiento profundo para poder segmentar sin perjudicar a nadie”.

Osvaldo Bassano, titular de la Asociación por la Defensa de los Derecho de los Usuarios y Consumidores (ADDUC), alertó: “No es el mismo aumento que en el otro gobierno, pero esto no resuelve el problema de fondo. Planteamos siempre que no puede haber aumento de ningún tipo porque el consumidor no tiene forma de pagarlo”.

“Es un problema muy complejo y no se va a solucionar hasta que se resuelva el monopolio que existe en las empresas de energía. Lo que me pone furioso es que con 500 muertos por día los tres grupos empresarios que dominan todo el mercado sigan pretendiendo cada vez más ganancias. Es un sistema que ofrece un servicio muy malo y es muy caro para los usuarios. Y estamos hablando de un derecho humano. De la única forma en que se puede resolver es con una intervención seria del Estado”, aseveró.

La mirada del Presidente

Durante un acto en San Martín, el presidente Alberto Fernández destacó el esfuerzo del gobierno para conseguir un aumento moderado: “Cuando yo les dije a los argentinos que se iba terminar la penuria de tener que elegir entre el medicamento y las tarifas de luz y gas, cumplí (…) Durante todo un año la tarifa estuvo congelada y cuando debimos corregirla, la corregimos lo mínimo necesario para que no afecte el ingreso de los argentinos, en un momento en el que yo sé que la economía y la inflación apremia”, afirmó.

Luego, comparó su gestión con la de Macri: “Si hubiera seguido con lo que indicaba la normativa en materia de regulación tarifaria que dejó vigente el gobierno que nos precedió, tendríamos que haber aumentado un 180% la tarifa de  electricidad y un 160% la de gas. Ese 160 de gas se convirtió en 6% y ese 180% de luz se convirtió en 9%. Sabemos que los argentinos hicieron un enorme esfuerzo y no podemos pedirle más esfuerzo todavía”, concluyó Fernández.