Trabajadoras y trabajadores que integran la Federación Argentina de Cartoneros, Carreros y Recicladores se movilizaron este martes desde el Obelisco hasta la secretaría de Ambiente, en San Martín al 400, “contra la importación de residuos”, y para que se revoque y deje sin efecto el Decreto 591/19 del Poder Ejecutivo, que modifica la normativa vigente desde 1992 y que, en poco más de 10 días, permitirá el ingreso de residuos al país sin certificado de inocuidad sanitaria y ambiental expedido en origen, ya que “resulta de imposible cumplimiento”, según consideró el decreto presidencial.

En este contexto, la Federación reclama “la revocatoria inmediata a la modificación del Decreto 181/1992, que flexibiliza normativas ambientales y excluye el trabajo de recicladores/as”.  

Ocurre que el Decreto 591/9, flexibiliza la entrada de residuos en caso de que “la sustancia u objeto se utilice para finalidades específicas” y “que exista un mercado o una demanda para dicha sustancia u objeto”, entre otros puntos.

En diálogo con Tiempo, Jackie Flores, referente de CTEP seccional Capital y Coordinadora de Promotoras Ambientales Cartoneras (MTE) explicó: “Un decreto así no solamente significa importación de residuos. En el medio vienen materiales reciclables, y lo que pretendemos visibilizar tiene que ver con números que la ciudadanía no tiene claros. Diariamente se generan 40 mil toneladas de basura en el país, del cual el 40 por ciento debería ser reciclable. Con más de 150.000 compañeros, reciclamos el 20 por ciento de la basura que se genera en el país”.  

“Si ellos pretenden instalar un decreto porque dicen que a la industria le falta material, la realidad es que acá hay un 20 por ciento de basura que nadie puede reciclar, y que termina en los basurales a cielo abierto que nosotros venimos denunciando, donde trabajan nuestras compañeras y compañeros, y en algunos casos hasta viven en esos basurales a cielo abierto, sin siquiera tener un guante, y el Estado nacional no se hace cargo”, remarcó Flores.

“Eso termina en los ríos y en los rellenos sanitarios. Entonces para qué, si todavía nos falta un montón, no solamente llevar a cabo la ley Basura Cero de la Ciudad, sino a nivel nacional, descaradamente firman un decreto donde permiten que materiales de otros países ingresen, y que la industria se lo pueda comprar”.

Días atrás, el secretario de Gobierno de Ambiente y Desarrollo Sustentable, Sergio Bergman, defendió el decreto presidencial al afirmar que “la tarea social productiva y digna de los recicladores urbanos y sus cooperativas de trabajo, no se ve limitada ni afectada de modo alguno por el nuevo decreto que está orientado a insumos de la industria para requerimientos específicos y con altos estándares de control ambiental”.

El precio del reciclado

La Federación pone sobre la mesa una discusión oculta, negada y que, con este decreto, puede oscurecerse aún más. “Ya no estamos pudiendo solventar el plato de comida. Imaginate si entra material de otro lado y que la industria haga lo que quiera… nosotros damos la discusión de que ningún gobierno, ni Nación, ni la Ciudad, quiere regularizar los precios del reciclado. Entonces, con este decreto cualquiera va a poner el precio. No solamente el precio económico. El precio de nuestras vidas. Nadie se pone a discutir eso, a nadie le interesa”, marcó Flores. “Cuando nos enteramos que el decreto existía, presentamos un recurso de revocatoria” recordó.

E insistió: “Es inhumano que podamos recibir la basura, los materiales reciclables de otros países, del primer mundo, como llaman ellos, cuando no nos hacemos cargo de lo que está pasando. Por qué la industria no le compra el material reciclable a nuestros compañeros, no solamente a los que están organizados, sino a los que están fuera de ella también. Eso estamos discutiendo y vamos a visualizar”.

“No solamente en Capital, en todas las provincias los compañeros nos vamos a levantar en contra de este decreto. Pedimos que se derogue, y que si hay algo superador, como ellos dicen, que lo discutan con la ciudadanía y con nuestro sector, no a escondidas de la sociedad”.