La Cooperativa de Trabajo de Pesca Artesanal Villa Gesell Ltda genera sesenta y dos puestos de trabajo en esta ciudad balnearia. El proyecto colectivo persigue la formación, sensibilización de los trabajadores implicados en la cadena de producción y comercialización de los productos pesqueros. Agradecen al Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (INAES) por la ayuda que les brindó durante el proceso de formación autogestiva.  

Este diario entrevistó a Martín Guiot, presidente de la cooperativa, quien contó los ejes sobre los que trabajan desde febrero de este año en forma ininterrumpida. Se trata de una iniciativa que surge con el objetivo de aportar transparencia, “tanto en la trazabilidad de los productos, las artes de pesca empleadas, los principios del comercio justo y la capacitación para informar correctamente al consumidor”, detalló el hombre de 53 años.

-¿Cuál es la visión en común de los socios de la cooperativa?

Un mundo donde los pescadores y pescadoras artesanales sean valorados por toda la sociedad. Porque sentimos orgullo de nuestra profesión y cultura. Es por eso que participamos con dignidad en la construcción de un mundo más justo y sostenible. Todos juntos por el bien común, promoviendo y poniendo en práctica la solidaridad en el colectivo que formamos.  

¿El colectivo que formaron tiene una misión central?

Si, es contribuir al fortalecimiento de la pesca artesanal y de sus poblaciones estableciendo vínculos con el sector pesquero para que propicien propuestas, proyectos y acciones basados en criterios de sostenibilidad y participación social. Esa es nuestra misión, la que compartimos entre todas las personas asociadas en la cooperativa.  

-¿Cómo se posicionan ante el sistema social actual?

En el mundo hay más de doscientos millones de pescadores artesanales, de pequeña escala, que dependen de los ecosistemas acuáticos para su supervivencia. La pesca artesanal contribuye a la alimentación de más de 1.500 millones de personas en el planeta. Además, incorpora a la mujer en el trabajo, genera empleo, fija población al territorio, tiene muy poco impacto en el ecosistema, bajas emisiones de dióxido de carbono y redistribuye los recursos pesqueros de forma más equitativa.

La pesca artesanal a pequeña escala reduce la pobreza y contribuye a la sostenibilidad social, económica y ambiental en mayor medida que los sistemas productivos más industrializados. Ahora los ecosistemas marinos, fluviales, de los que dependemos los pescadores artesanales, se encuentran seriamente amenazados por la sobreexplotación de los recursos, sobre todo por la acción de las flotas industriales, por la contaminación, entre otras cosas más.

-¿Qué logro alcanzado les dio satisfacción como grupo?

Nos satisface muchos que el documento final de la Conferencia de Naciones Unidas sobre Desarrollo Sostenible (conocida como Cumbre de Rio+20) en junio de 2012 recoja en su párrafo 175 el reconocimiento a este sistema productivo sostenible.

Sin embargo, nos preocupa la falta de compromiso firme de la regulación en la biodiversidad de alta mar. Porque esto también afecta de forma directa a los pescadores artesanales. De hecho, próximamente como cooperativa pasaremos a integrar la Federación de Cooperativas de Pesca Artesanal de Costa Marítima de la Provincia de Buenos Aires.

-¿Cuáles son los objetivos que persiguen?

Nosotros tenemos como objetivo ser facilitadora del cambio hacia una comunidad más justa, la cooperativa integra tanto al sector pesquero como a la administración pública y a la sociedad en sus principios y valores. Además trabajamos sobre pilares indisociables como ser el ambiental, el social, el económico y el de participación.

Promover la colaboración entre pescadores, y su incorporación en la vida social y las dinámicas de desarrollo e instar a la administración pública a que facilite la implementación de procesos y sistemas participativos de desarrollo. Inclusión del papel del pescador en la comunidad local y fomentar la participación de los trabajadores del mar en los procesos de toma de decisiones relacionadas con la protección de los ecosistemas en los que actuamos.

Otro de los objetivos de nuestra cooperativa es el de dignificar la profesión de pescador y el patrimonio cultural en el entorno de la pesca artesanal, también ante la sociedad en general. Por eso sensibilizamos a la sociedad, les transmitimos la profesión del pescador artesanal y su contribución a un mundo más justo y sostenible.

-¿Cuál es su mayor preocupación sobre el sistema ambiental?

El mar es la principal fuente de ingresos de los pescadores, por lo que su buena salud y equilibrio es vital para la actividad pesquera. Por su proximidad y conocimiento, el pescador representa un actor clave para liderar el proceso de protección de los recursos marinos.

Con el pilar ambiental buscamos trabajar la concientización ambiental en todas las personas de la sociedad, fomentar el interés colectivo y promover el desarrollo sostenible de las áreas y recursos marinos.

-¿Qué piensa sobre la economía de los pescadores?

Estamos condicionados por un sistema económico que fomenta la desigualdad social, el pescador artesanal se encuentra en una situación de fragilidad económica. Por esta razón, resolver en primer lugar el problema de la falta de ingresos económicos es un paso fundamental en la acción de nuestra Cooperativa Trabajo Pesca Artesanal Villa Gesell.

El objetivo del pilar económico de la intervención es contribuir a visibilizar la pesca artesanal como un sistema productivo sostenible y responsable. Así, intervenimos fomentando la comercialización directa de los productos provenientes de la pesca artesanal sostenible.

Lo hacemos mejorando su trazabilidad y gestión de la cadena de valor y desarrollando, sistemas alternativos o complementarios de generación de ingresos para las comunidades de pescadores, la diversificación del sector pesquero.

-¿Cuál es el enfoque metodológico que usan?

El enfoque metodológico que usamos es fiel a la participación directa de los pescadores: trabajar con los pescadores y, no para ellos. Nuestro interés colectivo es privilegiar el trabajo con las asociaciones representantes de los pescadores, promoviendo así el interés colectivo sobre el individual.

La autonomía que tenemos actúa como impulsora, transmisora y facilitadora de procesos, promoviendo una evolución progresiva hacia una autonomía completa de los pescadores. Trabajamos y promovemos la sostenibilidad ambiental, económica y social.

También está la colaboración, que promueve la colaboración abierta a otros actores con objetivos similares, la construcción, fortalecimiento de redes y la creación de alianzas con otras organizaciones -públicas, no lucrativas, de la comunidad científica, entre otras- para lograr la sostenibilidad integral.

-¿A quiénes agradece por los logros alcanzados por la cooperativa?

Desde ya agradecemos al Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (INAES), doctora Yanina Pousa y al equipo que la acompaña, por la responsabilidad y celeridad en tramitar nuestra matrícula. Al señor Intendente Municipal Gustavo Barrera; al director de producción Miguel Cisneros por su gestión en la formación de nuestra cooperativa. También a la Dirección Provincial de Acción Cooperativa (DIPAC) por el apoyo incondicional. Pero principalmente a los pescadores artesanales locales por sumarse y compartir estas mismas ideas y proyectos, que llevamos a cabo en forma conjunta y lo sostenemos en el tiempo.